Perplejidad es el sentimiento que embarga a los vecinos propietarios de las viviendas del Casco Viejo de Corralejo, que tras décadas de pleitos judiciales para recuperar sus viviendas y con 123 sentencias favorables, han recibido el pasado viernes la sentencia de la Audiencia Provincial de Las Palmas que absuelve a la decena de acusados de delito impropio, y lo reduce a un conflicto de intereses con los dueños de las casas.
“Lo positivo que sacamos de todo esto es que, al final, las casas que estos ‘tiburones’ pretendían quitarnos son nuestras, gracias a la lucha organizada y sin tregua de los vecinos”, afirma Miguel Socorro, portavoz de los afectados por el Casco Viejo de Corralejo.
Sin embargo, no oculta la frustración que produce el que los culpables de esta estafa inmobiliaria, que estuvieron a punto de apropiarse de lo que fue el núcleo original de Corralejo, no acaben pagando el daño moral y económico que han infringido a todas las familias desde el año 2001.
“Estamos indignados, expresa Miguel Socorro, nos han hecho mucho daño. Les hemos dado una lección pero no esperábamos esta sentencia. Querían quedarse con el pueblo, han comprado un pueblo y encima no les pasa nada. No podemos creer que el magistrado concluya que los buenos son ellos, y que después de urdir esta trama se vayan de rositas, sin ni siquiera pagar las costas, como si no hubiera pasado nada”, lamenta.
En la sentencia, que absuelve al conjunto de empresarios, abogados y particulares acusados, el magistrado ha considerado que como los vecinos han recuperado la titularidad de sus casas y con el argumento de que no se han podido cuantificar con exactitud los gastos que este conflicto ha causado a los dueños, “nos lleva a este Tribunal a dictar una pronunciamiento absolutorio, con todas las consecuencias favorables y liberatorias, para todos y cada uno de los acusados y acusadas, incluidos el acusado y acusada que han reconocido los hechos imputados”.
El portavoz vecinal asegura que los propietarios sí expresaron con claridad los gastos ocasionados. Socorro lamenta el fallo del Magistrado Pedro Martín Puentes, a pesar de todas las sentencias anteriores que han dado la razón a los propietarios y del contundente argumentario y las pruebas aportadas por la acusación particular y el Ministerio Fiscal. Y recuerda que, casualmente, este magistrado conocía en profundidad este tema dado que fue ponente de tres procedimientos anteriores dando la razón a los vecinos, un hecho que hace aún más sorprendente la sentencia dictada.