Javier Rodríguez, portavoz de la Red de protección forestal y rural ASIREM, hace en Radio San Borondón un análisis de la situación actual de Canarias y de las consecuencias que está generando el actual modelo económico.
ASIREM, palabra guanche que significa esperanza, es un colectivo de reciente creación que nació a raíz de la coordinación de personas y organizaciones que se movilizaron para colaborar y apoyar a los afectados por el devastador incendio del pasado mes de agosto en Tenerife y que tienen en común la defensa de nuestro territorio.
Javier afirma que el modelo económico basado en el turismo está agotado, por ello es necesario plantar cara y que el 20 de abril se produzca una masiva manifestación para exigir al Gobierno poner sobre la mesa este modelo insostenible y abrir un debate sobre qué futuro queremos, donde se escuche a la sociedad civil, no solo como ha ocurrido hasta ahora, a aquellos grandes poderes que defienden sus intereses privados en determinados despachos, mientras el resto de la sociedad permanece al margen.
Frente al mensaje de que el turismo es nuestro motor, desde ASIREM se defiende que la verdadera riqueza es nuestro territorio, los valores naturales y culturales, pero sobre todo la gente.
Señala que es lamentable que este año se estén reactivando proyectos como la urbanización de lujo Cuna del Alma en el Puertito de Adeje y el Hotel de La Tejita, que estaban legalmente paralizados. “Esto hay que denunciarlo -afirma- porque la sensación que tiene la ciudadanía es que los políticos se han transformando en gestores de grandes proyectos privados que, cuando tropiezan con alguna traba legal, allí están para arreglarlo”.
Una situación que según el activista ha generado un hartazgo en la sociedad, que ve como los políticos en lugar de trabajar por lo público han potenciado un modelo insostenible que nos ha abocado a un contexto de emergencia climática y a una situación insostenible.
Respecto a las acusaciones de turismofobia por parte de políticos y empresarios, Javier Rodríguez afirma: “Los turismofóbicos son ellos, que con su pésima gestión nos han llevado a una situación que ha llegado a ser tan insostenible que ya es la sociedad canaria quien sale a la calle a exigir un cambio de modelo”.