Escucha la entrevista con Taleb Alisalem, activista saharaui
La semana pasada tuvo lugar la XII Reunión de Alto Nivel entre España y Marruecos. El presidente Sánchez y doce de sus ministros se desplazaron hasta Rabat y ni siquiera fueron recibidos por el monarca Mohammed VI. Hablamos en Radio San Borondón con Taleb Alisalem, activista saharaui, sobre el contexto que rodea las relaciones internacionales en el norte de África.
El giro de Pedro Sánchez considerando la aceptación del dominio marroquí sobre los territorios saharauis sigue despertando indignación. A pesar de que el gobierno español ha intentado extender la idea de que dicha decisión está orientada a mejorar las relaciones con el reino alauí, en opinión de Taleb Alisalem “que el rey de Marruecos no reciba a Pedro Sánchez ni a sus doce ministros es la mayor prueba de la inexistencia de esa alianza que nos intentan vender”.
Recuerda el trato que han dado los últimos monarcas marroquíes a los países “amigos”, como Francia y los estados del golfo pérsico, y asegura el activista que no es cierto que Marruecos considere a España como aliado, sino como “un rival y una amenaza”.
“Siempre va a haber crisis con Marruecos”, razona Alisalem, puesto que aunque el foco se ponga ahora sobre el Sáhara Occidental, considera que posteriormente apuntarán hacia Ceuta y Melilla y luego a las aguas canarias y en algún momento también hacia las Islas Canarias. “Vais a sufrirlo vosotros, porque estamos hablando de una ideología expansionista del reino de Marruecos y que no solo afecta al pueblo saharaui, también a Argelia, Mauritania, Senegal, Mali y por supuesto al territorio español”, expresa el activista.
Relata que la estrategia de Marruecos ha estado orientada en dos vertientes: por un lado, el establecimiento de alianzas estratégicas, con Estados Unidos, Israel, Francia y los países del golfo. En segundo lugar, señala Taleb Alisalem que la monarquía alauí “ha basado su política en prácticas mafiosas que no respetan ningún tipo de legalidad internacional”. Cita la red de lobbistas que tiene establecida Marruecos en el Parlamento Europeo o el espionaje a través de Pegasus a los presidentes Sánchez y Macron como ejemplos del tipo de coacciones que practica Marruecos, alterando el curso de las relaciones internacionales y vulnerando los cauces diplomáticos para lograr sus objetivos geopolíticos.
Para Taleb Alisalem, “no hay nada que justifique que un gobierno supuestamente progresista viole la legalidad internacional y apoye a un régimen que viola los derechos humanos y alimente a un expansionismo que también afecta al Estado español”. Comenta que existe una creencia generalizada en que existe información con la que Marruecos está chantajeando al PSOE.
Una nueva fase en el conflicto
En relación a las conclusiones extraídas del último congreso del Frente Polisario celebrado a principios de este año, Taleb Alisalem traslada la sensación generalizada de que la apelación a la legalidad internacional no ha servido para imponer la resolución pacífica del conflicto, puesto que las resoluciones favorables de la ONU continúan siendo vulneradas por la ocupación marroquí.
“Hay una potencia joven que está muy cansada de que jueguen con nuestro derecho y por desgracia ve que lo único que te lleva a primer plano para tener una solución es la violencia”, resalta el activista. La intensificación de la lucha armada y la búsqueda de alianzas internacionales es la vía consensuada a partir del último congreso del Frente Polisario para intentar forzar a Marruecos a abandonar los territorios saharauis y claudicar en su afán expansionista.