Escucha la entrevista completa con Julio Cuenca, arqueólogo.
Su trabajo como arqueólogo sirvió para que la UNESCO declarara en 2019 Patrimonio de la Humanidad el Paisaje Natural de Risco Caído y las Montañas Sagradas en Gran Canaria. Desde su oposición pública al proyecto de Chira-Soria, declara sufrir un bloqueo por parte del Cabildo insular que lidera Antonio Morales. Hablamos en La Trapera de Radio San Borondón con Julio Cuenca Sanabria.
Se muestra preocupado por la posibilidad de que finalmente se construya la central hidroeléctrica Salto de Chira que acabaría con el paisaje del Barranco de Arguineguín y que se ha convertido en una de las grandes polémicas del gobierno de Antonio Morales.
Julio Cuenca afirma que la empresa promotora, Red Eléctrica, es “una multinacional con un poder que no hay nadie que le tosa”. Asegura que las grandes obras de esta naturaleza se están paralizando en todo el mundo, por distintas razones asociadas a la incertidumbre sobre el suministro de materias primas, transportes y costes de ejecución. Recuerda que la propia empresa que impulsa este megaproyecto lo ha definido como “el proyecto de ingeniería civil más importante de España”.
Señala el arqueólogo que se necesita una oposición política potente, articulada desde el ámbito insular en primera instancia, junto a una presión ciudadana muy significativa. Sin la concurrencia de ambos elementos, admite Cuenca “esto difícilmente se parará”.
“Hay unas elecciones a pocos meses vista y no creo que sean tan imprudentes de meterse en esas obras”, señala Julio Cuenca. Advierte además que el inicio de los trabajos será la fase más visible y dura: “eso les va a pasar factura políticamente y ellos saben que cada vez la indignación social es mayor”, subraya.
Julio Cuenca afirma haber sido condenado al ostracismo por el Cabildo de Gran Canaria desde que empezó a hacer pública su oposición al proyecto Chira-Soria y ahora también por el Gobierno de Canarias, que no ha contratado ni una sola vez en todo 2022 sus servicios. “Nuestra empresa se tendrá que poner en concurso de acreedores porque no encontramos la manera”, reconoce.
Más allá de cómo le ha afectado personalmente la actuación del gobierno insular, Julio Cuenca hace visible su indignación al ver cómo estos macroproyectos se extienden por todas las Islas: “hay un asalto de los poderes económicos contra todos los territorios”. No entiende cómo se está profundizando en el modelo del turismo de masas, “cuando todo el mundo está hablando de desaceleración y luchar contra la huella de carbono, ustedes están diciendo que vengan más aviones cargados de más turistas y construyamos más hoteles”.
Para dar respuesta a los retos que se le presentan a Canarias y enfrentar los ataques al territorio, Julio Cuenca aboga por la construcción de un frente ecologista común, que coordine las luchas en todas las islas y permita a los colectivos ayudarse mutuamente. Sostiene que sería necesario crear un frente archipielágico y tener cada isla organizada en una sola voz con todos los colectivos que la conforman.