Escucha la entrevista completa con Alberto Gutiérrez Poleo, periodista deportivo.
Recientemente se dio a conocer la decisión de Miguel Concepción de abandonar la presidencia del Club Deportivo Tenerife y su intención de dejar al frente del representativo el expresidente del gobierno canario, Paulino Rivero. Para comentar la jugada, volvimos a contar en Radio San Borondón con una de las voces que más y mejor ha narrado la historia del CD Tenerife, dentro y fuera del terreno de juego: Alberto Gutiérrez Poleo.
“Tengo mis dudas de que al final Paulino acepte”, declaró el periodista, aludiendo a dos motivos fundamentales. En primer lugar, porque tal y como acordó Miguel Concepción cuando Pier Luigi Cherubino aspiró a sustituirle, explica Gutiérrez Poleo, “el presidente del club no va a cobrar nada”.
En segundo lugar, según señala el comentarista deportivo, Paulino Rivero está inmerso en dos asuntos que sí le aportan rentabilidad económica en la actualidad. Por un lado, es consejero de Naviera Armas, y, por otro, está realizando algunas inversiones en Tenerife dentro del mercado de los combustibles.
Si bien Alberto Gutiérrez Poleo admite su alegría por que Miguel Concepción abandone la administración del club, subraya que de confirmarse esa transición hacia Paulino Rivero “no vamos a ganar en nada”.
Asimismo, afirma el periodista que “Miguel Concepción no se va por voluntad propia, ni porque quiera al Tenerife, se va porque hay una sentencia que va a salir antes del 31 de diciembre que tiene toda la pinta de que no es nada agradable para él”.
La mala gestión que ha efectuado el hasta ahora presidente del representativo insular con sus propias empresas, lleva a Gutiérrez Poleo a cuestionar “no hay que preguntarle cuántas acciones tiene, la gran pregunta es: ¿cómo ha conseguido esas acciones?; porque todos sus negocios han estado materialmente en quiebra, ¿qué ingresos ha tenido?”.
La actuación de Miguel Concepción tanto al frente del CD Tenerife como a través de las compañías que ha dirigido han ensombrecido su figura. El presidente del Tenerife es hoy un delincuente confeso ante los tribunales, por las estafas ejecutadas durante su gestión de Islas Airways, y se mantiene viva la investigación sobre la Ciudad Deportiva del Club en Geneto, que Alberto Gutiérrez no duda en calificar de “pelotazo” con base en las informaciones publicadas hasta el momento.