Conversamos con la periodista y escritora sevillana María Iglesias, especializada en materia de migraciones, autora del libro El granado de Lesbos (2019) y guionista del documental Contramarea, ambos sobre los refugiados en el Egeo.
“La migración va con el ser humano – afirmó – las personas nos movemos para buscar nuestra supervivencia, así ha sido, es y será”. La periodista insiste en que hay que ir a los orígenes de la migración, porque está convencida de que nadie, ni nuestros abuelos que tuvieron que marcharse, ni los jóvenes que llegan hoy a España, lo hacen por voluntad propia… “¿Entonces por que siguen viniendo? – se pregunta – es tan sencillo como atender a lo que está pasando en cada uno de los lugares de procedencia”.
Iglesias ha hecho un seguimiento de la reciente visita de Pedro Sánchez a Senegal y se muestra muy crítica por los motivos de la misma, por la ocasión elegida, por los acuerdos firmados con el gobierno del presidente Maqui Sall y por la falta de reprobación del Sánchez hacia las graves violaciones de derechos humanos que su homólogo senegalés está fomentando.
“En Senegal se vive una represión política brutal. El presidente del país, ha detenido por tercera vez en los último 7 años al principal líder opositor Ousmane Sonko, lo mete en la cárcel, detiene a más de quinientas personas, cierra dos canales de televisión nacional, tirotea a la gente que se manifiesta en las calles y mata a 12 o 13 personas, algunos de ellos niños”, afirma. Por ello se pregunta la periodista cómo se puede concebir que al mes de todos estos graves sucesos, Pedro Sánchez viaje a Senegal “a darle palmaditas en la espalda a Maqui Sall”?
La periodista recuerda que los verdaderos motivos de la “mini gira” de Pedro Sánchez a África (sólo viajó a Angola y Senegal) eran económicos, obtener condiciones ventajosas para España del petróleo y gas de Senegal, como antes hicieron con los acuerdos pesqueros, por los que nos quedábamos con sus caladeros y se les impedía a ellos continuar con su pesca artesanal. Pero especialmente el Presidente español llevaba como prioridad en su agenda, frenar la salida de cayucos de Senegal y activar al mismo tiempo los vuelos de deportación de migrantes…
Reprocha especialmente la actitud del presidente español Pedro Sánchez, que obvió responder en la Rueda de Prensa celebrada con motivo de la visita, si la Unión Europea va a investigar el destino real de los 180 millones que recibe el Gobierno senegalés para invertir en el país y frenar el éxodo de tantos jóvenes. Y evitó además pronunciarse sobre el activista Bubacar Seye, preso desde el pasado mes de enero precisamente por reclamar transparencia al gobierno de Sall respecto a estas ayudas de la Unión Europea.
Todo esto es mucho más intolerable teniendo en cuenta que Bubacar Seye tiene nacionalidad española y precisamente ha afirmado en una reciente entrevista a María Iglesias que ni antes de la visita del presidente español, ni después, la representación diplomática española se ha interesado por su situación. Bucar Seye acusó en dicha entrevista a Pedro Sánchez de ser cómplice del atropello de sus derechos.
En general, María Iglesias señala la gran hipocresía que existe en las relaciones internacionales de los gobiernos y en particular la del actual gobierno de España, donde, por una parte, el Vicepresidente de la Comisión Europea el español Josep Borrell va a llamar la atención al ministro de Exteriores ruso por el hostigamiento al opositor Navalni, mientras el Presidente Pedro Sánchez calla los casos de encarcelamiento y persecución a los líderes sociales en Senegal.