Alumnas de la ULL denuncian que no se ha efectuado el ingreso de las ayudas para alumnado con especiales dificultades económicas, con resolución a fecha de 21 de septiembre de 2020. Destacan que no reciben ninguna información institucional: “ya no sabemos qué hacer”.
Para la concesión de la ayuda, gestionada por el Negociado de Servicios Asistenciales, se prioriza al estudiantado con algún familiar fallecido a causa de la covid-19. Una de las alumnas explica que otro de los requisitos era enviar el documento del Alta de Datos a Terceros por correo, y no desde la sede electrónica. Una vez realizado, se le envió un documento confirmando la recepción. Se comunicó al estudiantado solicitante que los ingresos comenzarían a partir de diciembre. Tras no recibirlo, la alumna se pone en contacto con el Negociado de Servicios Asistenciales, desde donde le dicen que el proceso va a demorarse. También se pusieron en contacto con el Consejo de Estudiantes, recibiendo una información contradictoria: la gestión de la ayuda se encontraría en su “última fase”, a punto de efectuar los ingresos.
El órgano gestor comentó que todavía no se han podido hacer los pagos, y que no son tramitados por la ULL, pero desconoce quién lo hace. El Consejo de Estudiantes, no obstante, afirmó esta semana que los pagos comenzaron a hacerse el viernes 10 de enero. Mientras, el Negociado de Servicios Asistenciales no responde a las llamadas ni correos de las alumnas.
Recordemos que estas ayudas aparecen tras el confinamiento de 2020, para ayudar a paliar los problemas económicos surgidos tras esta situación. Recordemos que estas ayudas aparecen tras el confinamiento de 2020 para ayudar a paliar los problemas económicos surgidos tras esta situación. En el mismo marco, acompañando a ese paquete de ayudas, se aprobó la consabida exhortación del pago de las tasas extras de segundas matrículas y sucesivas, conjuntamente con Gobierno de Canarias y ULPG.
Como se ha denunciado ya, esto no se cumplió y las instituciones no parecen haber mostrado atisbo alguno de remordimiento.
Nos dijeron que trabajarían por aliviar la situación de las personas con dificultades económicas y lo que hemos obtenido es abandono institucional y un puñado de promesas incumplidas. ¿A qué esperan para revertir esto? Los ratios de abandono en los estudios académicos son alarmantes entre el estudiantado canario, precario como ninguno, y cosas como las que hemos venido poniendo en cuestión van en el camino de agravarlo. La desatención y el abandono de las instituciones canarias hacia su estudiantado —en este caso la ULL y el Gobierno de Canarias— llega a ser frívola y obscena. La falta de sensibilidad institucional es sistemática.