La Institución y el equipo de Risco Caído considera prioritario reconstruir la vida de los habitantes de la cumbre de Gran Canaria
El Cabildo de Gran Canaria, responsable del Paisaje Cultural Risco Caído y las Montañas Sagradas de Gran Canaria, expresa su consternación por el grave incendio declarado en las cumbres de la Isla, ya que esta tragedia no solo daña su paisaje, sino también la integridad física y moral de una población que con muchísimo esfuerzo y tesón ha sido la verdadera artífice de la riqueza que fue declarada hace apenas un mes Patrimonio Mundial de la Unesco.
El presidente del Cabildo de Gran Canaria, Antonio Morales, anunció hoy que ya ha encargado un informe para recabar los daños causados a la población en los tres municipios afectados por el incendio, Artenara, Tejeda y Gáldar, cuyos ayuntamientos abrirán una oficina de información a la ciudadanía para que las familias den cuenta de los daños y poder habilitar el protocolo de ayudas para su vuelta a la normalidad.
El incendio ha afectado a 1.200 hectáreas según la estimación inicial, y la previsión es poder darlo por estabilizado a lo largo de esta jornada después de tres días sin tregua desde su declaración, si bien la noticia más importante es que no ha habido que lamentar pérdidas humanas.
Por otra parte, se han sucedido las muestras de apoyo y solidaridad, tanto de empresas que han ofrecido soporte, como de la población, que pide colaborar en la repoblación.
La Institución seguirá centrada en el control y extinción de este incendio, que hasta declarar el esperado “humo cero” aún pasarán días e incluso semanas, así como en el control y extinción del incendio declarado anoche en Cazadores y que arrasó en apenas unas horas 160 hectáreas.
En cuanto ambos incendios queden liquidados, los técnicos del Cabildo de Gran Canaria diagnosticarán el estado de la superficie afectada y definirán las medidas de recuperación del territorio y de reforestación por parte de todas las personas que quieren colaborar, lo que permitirá activar un formulario de inscripción para este incendio de 2019, al igual que ya hiciera para el de 2017 con un formulario que ya no está activo.
El presidente recordó que el Cabildo habilitó un fondo equivalente al céntimo verde para reforestación de 4,5 millones de euros que se centrarán en las zonas afectadas por el fuego. En cualquier caso, las actividades de reforestación se acometerán a partir de noviembre con la llegada del otoño.
Patrimonio Mundial
El presidente del Cabildo y el equipo de Risco Caído ha querido agradecer el esfuerzo de todos los equipos que han trabajado con tanto ahínco para frenar el avance del incendio y se pone a disposición de las familias afectadas, ya que un millar tuvo que ser evacuada para evitar tragedias personales.
La prioridad del Cabildo es la reconstrucción de las zonas dañadas para que siga atesorando los valores objeto de la declaración como Patrimonio Mundial y, especialmente, para que siga siendo un lugar donde vivir con dignidad, seguridad y orgullo.
Y es que las llamas han consumido espacios de un paisaje lleno de vida, con una rica biodiversidad y tras el que hay un enorme trabajo de conservación, repoblación y recuperación de áreas que ya habían sido afectadas por incendios anteriores.
Todo el equipo del proyecto de Risco Caído y la población de Gran Canaria ha vivido estas largas horas con mucho dolor por el sufrimiento porque cuando arde el corazón de Gran Canaria, arde el corazón de sus habitantes, y en especial por las personas que han perdido bienes, recuerdos y el esfuerzo de años de trabajo.
La Institución también trabajará, tal como ya anunció tras la declaración de la Unesco, para establecer la mejor estrategia de gestión para que este tipo de sucesos no vuelva a repetirse. La declaración como Patrimonio Mundial es un compromiso continuado de gestión de un territorio y de la vida digna y sostenible de su gente, por lo que el Cabildo trabaja en un Plan de Prevención de Incendios, lo que además es uno de los requisitos de la Unesco.
De hecho, el Cabildo ya está elaborando un ambicioso plan estratégico de recuperación del sector primario en la zona, clave para la prevención de incendios, puesto que potenciar este sector es una de las maneras de garantizar la conservación tanto cultural como paisajística.
El abandono del campo ha generado un problema planetario con los denominados incendios de tercera generación, es decir, cada vez más agresivos por la acumulación de vegetación seca, un combustible vegetal que antes no se acumulaba en esta medida por el uso que hacía de ella la población.
Revertir el abandono del campo y frenar la pérdida de actividades tradicionales es, además, una de las estrategias necesarias para paliar los efectos de un cambio global y climático cuyos efectos ya son palpables.
La experiencia ha demostrado que el pinar vuelve a recuperarse en pocos años debido a su adaptación al entorno volcánico de la isla. La recuperación es una tarea que en este caso excede la reversión medioambiental, ya que pasa por reconstruir los espacios habitados y trabajados por hombres y mujeres que encierran esa herencia cultural trasmitida a través de numerosas generaciones y que son atributos del Paisaje Cultural.