Unidas Podemos (Izquierda Unida, Podemos y Equo) comienza a definir cómo será su trabajo en el Ayuntamiento de Santa Cruz para los próximos 4 años con el reparto de funciones y responsabilidades entre sus tres concejales, dos más que en las pasadas elecciones, en las que Izquierda Unida concurrió en solitario y Podemos no se presentó.
Unidas Podemos apoyó con los votos de sus tres concejales la investidura de la alcaldesa socialista Patricia Hernández, aunque no estará en el gobierno suscrito entre PSOE y Ciudadanos.
Desde su trabajo en la oposición, el grupo ha designado a Ramón Trujillo como portavoz, al que también le ha encargado el control y las propuestas e iniciativas de las políticas de Urbanismo, Servicios Públicos y Economía. Este es el segundo mandato del concejal de Izquierda Unida, que también asumirá el seguimiento del área de Hacienda.
Yaiza Gorrín, secretaria general de Podemos Santa Cruz, se estrena en la política institucional este año como segunda de la lista y portavoz adjunta del grupo. Será responsable de proponer acciones y supervisar las decisiones tomadas en Cultura y Patrimonio, Igualdad, Participación Ciudadana, Empleo, Servicios Sociales, Accesibilidad y Vivienda. También será la representante de Unidas Podemos en el Consejo de la Mujer.
Dolores Espinosa, también de Podemos, se ocupará de fiscalizar el trabajo en Educación, Juventud y Deportes, Recursos humanos, Seguridad, Movilidad, Medio Ambiente y Fiestas y asumirá la portavocía de Unidas Podemos en el Consejo Escolar Municipal.
La coalición formada por Izquierda Unida y Podemos obtuvo 9.289 votos en las elecciones municipales del pasado 26 de junio, situándose como tercera fuerza política en la ciudad por delante del Partido Popular (8.419) y Ciudadanos (7.254).
Los votos favorables de Unidas Podemos a la investidura de la socialista Patricia Hernández como alcaldesa, permitieron acabar con 30 años de gobierno de Coalición Canaria en la ciudad y han supuesto un vuelco en las expectativas de vida de la ciudadanía.
El apoyo estuvo condicionado por la aprobación de una serie de medidas sociales que Unidas Podemos puso como condición para dar su voto favorable a la alcaldesa: la construcción o compra de hasta de 400 viviendas públicas en este mandato, la construcción de cinco escuelas infantiles públicas, potenciar la atención domiciliaria para beneficiar a 2.400 personas o aumentar el personal del IMAS y las ayudas sociales.
Con este reparto de funciones “hemos empezado a trabajar para ejercer una oposición firme, pero constructiva desde la que defenderemos nuestro acuerdo programático con los socialistas”, explica Yaiza Gorrín.