El 5 de junio se conmemora el día Mundial del Medio Ambiente. El sindicato STEC-IC considera que la emergencia climática que estamos viviendo debe afrontarse con recursos y políticas transformadoras que perduren en el tiempo.
Es lo que demandan los miles de estudiantes de todos los niveles educativos que, tanto en Canarias como en el resto del Estado y Europa, salen a la calle para exigir que se diga la verdad sobre lo que los informes científicos pronostican, avalados por el Panel Intergubernamental del Cambio Climático de la ONU y el grupo internacional de expertos, y que se adopten medidas tan drásticas como la realidad requiere.
El sindicato plantea que la nueva Consejería de Educación, por ser su ámbito laboral, la importancia que tiene que en la Red de Centros Canarios sufragados con dinero público se adopten medidas tan elementales como el reciclaje en origen, el sombreado con cubiertas vegetales, el cuidado de jardines y huertos escolares, la educación en valores de sostenibilidad o la sustitución de las fuentes de energía tradicionales de los propios centros por placas solares, fotovoltaicas u otras tecnologías que implementen energías limpias porque, entre otras cosas, somos una tierra pródiga en fuentes de energías alternativas como la solar, la eólica, la geotérmica, etc.
Aseguran que en Canarias existe un absoluto abandono respecto a este grave problema, incluyendo el ámbito educativo, a pesar de ser un territorio especialmente vulnerable como se está demostrando, pero la desidia, el desinterés y la falta de lucidez por parte de las autoridades nos han abocado a la inacción y la parálisis.
Recuerda el sindicato el gravísimo problema que originan los gases de efecto invernadero tiene ya unas consecuencias, evidentes por otra parte, que se agravarán con el tiempo hasta dejar un mundo absolutamente devastado e irreconocible, provocando una crisis ecológica y humanitaria que acabará con la muerte de millones de personas y la pérdida de biodiversidad más importante de la historia reciente.
Desde el STEC-IC se exige a las autoridades que vayan a tener responsabilidades de gobierno, tanto a escala estatal como canaria, que asuman como prioridad la lucha contra el cambio climático y se comprometan a adoptar las medidas necesarias, por duras que sean, para frenar el aumento de las temperaturas que pone en peligro la supervivencia de las generaciones futuras.
Por todo ello, alertan y exigen que los centros existentes y los de nueva construcción contengan los elementos suficientes para luchar con eficacia contra el calentamiento global.
“Eficiencia energética, voluntad política, conciencia social y transformación económica son las claves para poder limitar unos efectos que ya no tienen retorno, pero podemos limitar su carácter destructivo, en manos de nuestros responsables políticos y en las nuestras está esta labor impostergable”, concluyen.