La confluencia de partidos independentistas califica a las autoridades españolas de incapaces, silentes y cómplices por omisión de esas muertes, ya que mientras destinan medios para atajar la piratería o el terrorismo yihadista a decenas de miles de kilómetros, miran para otro lado con las mafias de trata de personas en el cercano continente.
Para los independentistas canarios, el gobierno español, junto a sus aliados neoliberales en la Unión Europea, practican un apartheid encubierto para con quienes intentan escapar de los conflictos políticos, el subdesarrollo y el empobrecimiento que genera actualmente el neocolonialismo europeo en África y sus multinacionales.
Para AHORA CANARIAS, desde antes incluso del franquismo, el Estado español siempre se ha mostrado manifiestamente incapaz de tener una política exterior cabal, de mutuo respeto y recíproca colaboración en África, torpeza que ha continuado con los sucesivos gobiernos de los partidos del régimen del 78 y que va a tener su continuidad en la crisis humanitaria en ciernes que se aproxima.
Para los independentistas canarios, resulta patético que, mientras España juega a ser grumete de los conflictos que crea EEUU en distintos países de Oriente medio y destina recursos que enmascara de humanitarios en misiones fantasma, los dineros y capital humano que debería destinar para que no mueran personas inocentes como este bebé no se encuentran para combatir a mafias y tramas que tienen perfectamente localizadas.
AHORA CANARIAS cree que el brazo de mar que separa las costas continentales africanas del archipiélago se pueden convertir en los próximos meses y años en un verdadero MURO de las lamentaciones, en una fosa submarina que ahogue definitivamente el sufrimiento de decenas de miles de personas que huyen de guerras, regímenes, mafias y un cambio climático del que Europa y el Estado español son colaboradores claros y meridianos.
Los independentistas canarios se ratifican en su denuncia de que un gobierno canario con soberanía actuaría con una política exterior más decidida, coherente y humanitaria al respecto, articularía medidas para afrontar las problemáticas en origen y establecería los puentes económicos y comerciales idóneos para que Canarias jugará un papel de mutuo interés y beneficio con los países africanos vecinos.