Entrevista a Amparo Tomé, socióloga, experta en educación y temas de género en Radio San Borondón
La destacada socióloga, que recientemente intervino en Tenerife, en un Encuentro en la Asociación Domitila Hernández, expuso su visión de la situación actual de la educación, de la importancia de educar en valores, la coeducación, el sexismo, los estereotipos de género,…
Reivindicar la bondad
La experta señala la importancia de educar en valores, que en la sociedad actual se han ido perdiendo: “hablamos de ellos pero no educamos en ellos», afirma. Plantea que se nos han olvidado valores como la bondad y que hoy, una persona buena se considera casi tonta, «para muchos jóvenes, lo inteligente es trabajar lo menos posible y ganar el máximo beneficio”, afirma. No se educa a los niños en el respeto, la importancia de tomar decisiones por uno mismo, en el concepto de responsabilidad cívica, familiar, con el entorno y el medio ambiente…
Compartir en lugar de Competir
En ese sentido señala que en la Escuela, continúa prevaleciendo el concepto de competir frente al valor de compartir: “son términos que se han trastocado para malvivir, nos empujamos nos violentamos, hacemos bulling… ¿por qué nos queremos herir unos a otros en las aulas?”, a lo que responde: “Porque la bondad ha desaparecido”…
Frente a la empatía, Compasión
Tomé destaca asimismo que la empatía, una cualidad de la que tanto se habla en la actualidad, viene a concretarse en una actitud de lamentar y darnos pena la pobreza o el sufrimiento de los demás, pero desde nuestra pasividad, sin hacer nada para cambiarlo… Y la contrapone con el concepto de compasión, que es lo que nos activa a movilizarnos para cambiar las cosas y buscar ese mundo mejor…
La educación o es co-educativa o hemos fracasado
La socióloga expone ampliamente el significado de modelo de co-educación, frente a los anteriormente existentes en la enseñanza española: el modelo de la escuela franquista y el mixto a partir de la Ley del 70, en el que los chicos y las chicas comparten las aulas.
La co-educación parte del hecho de que la escuela ha estado pensada solo para los varones, “no solo en España, sino a nivel general en el mundo”, puntualiza. Ello parte del inicio de la escolarización , en el siglo XVIII, tras la ilustración, cuando eran solo los hombres los que tenían valor social, y a partir de ahí se construyen las escuelas con el patrón masculino. Pero cuando la mujer fue entrando en la Escuela se siguió con ese modelo masculinizado.
En ese sentido, Amparo Tomé indica que los libros de texto, en general, están escritos en masculino, con enseñanzas que tienen que ver más con el siglo XIX que con el siglo XXI… “con lo cual, los libros de texto con perdón de las editoriales no sirven prácticamente para nada”, afirma.
Una de las carencias fundamentales en la educación actual es para la socióloga, el tipo de preparación antes de entrar en la escuela primaria: “es inválida, pues no se tratan aspectos como la música: todos los niños deberían tener una enseñanza musical básica, todos los niños deberían saber tocar un instrumento”. Otros dos aspectos fundamentales son la expresión plástica y la expresividad “el mundo físico”, lo relacionado con el cuerpo, el saber para que sirve el cuerpo “y ahí entra la sexualidad, que es básica para el desarrollo humano, debemos aborda en la Escuela temas que han sido tabú, debido a la iglesia y los gobiernos. Por ello concluye que “la educación o es coeducativa, o habremos fracasado”.
Otro aspecto preocupante, considera que son los estereotipos de género. En este sentido destaca que es un problema no solo atañe a las niñas sino que también lo sufren los niños, que deben adaptarse al estereotipo del género masculino: que sea fuertes, violentos, que no les importe el riesgo… así se ven forzados desde niños a pelearse entre ellos, a colgarse de un metro, a matarse con las drogas poco a poco … todo eso para ser más machos que los demás. Para Tomé, este tipo de masculinidad lo que hace es llevarlos al sufrimiento y en un momento determinado a morir de ataques al corazón o de frustración incluso al suicidio.