Entrevista a Antonio Rodríguez en Radio San Borondón
SB-Noticias.- Denuncian que solo hay 2 funcionarios por cada 140 internos y que no hay psiquiatra en el Centro
Antonio Rodríguez, Delegado de CCOO en el Centro Penitenciario de Tenerife ha denunciado en Radio San Borondón el incremento de las agresiones en los Centros Penitenciarios.
A las agresiones producidas el pasado 24 de noviembre en el módulo de mujeres y el día 28 en el módulo de normalización de conductas, este domingo día 3 en el Departamento de Enfermería se produjo una agresión por parte de un interno que tiene reconocido un grado de limitación en la actividad global del 55 % -trastorno cognitivo por dependencia de sustancias psicoactivas de etiología tóxica, trastorno de la personalidad y de la afectividad-. Ante una orden del funcionario, el interno se abalanzó propinándole patadas, puñetazos y arañazos. La rápida intervención de otros funcionarios evitó males mayores.
Destaca Antonio Rodríguez que Tenerife II era un Centro con un perfil de internos poco agresivos pero debido a una serie de circunstancias que se vienen produciendo no solo en Tenerife sino a nivel de todo el Estado, se ha llegado a un importante incremento de la agresividad, violencia y agresiones que sufre el personal, “Va a llegar un momento -afirma- que las cárceles colapsen, por falta personal y por no abordar con seriedad todos los problemas que existen en la actualidad”.
En la actualidad es incuestionable la falta de personal, ya que hay módulos donde hay dos funcionarios por cada 140 internos.
Rodríguez destaca también el envejecimiento de la plantilla, ya que en la actualidad más del 25 % supera los 50 años de edad.
Otra de las principales reivindicaciones de los funcionarios penitenciarios es la desatención a las enfermedades mentales que padece buena parte de la población reclusa. En concreto un 25 % – según cifras oficiales- pero que podría ascender al 30 % – tiene trastornos de conducta, por dependencia sustancias toxicas, trastornos personalidad etc., que deben ser tratados por profesionales. Recuerdan asimismo que la mitad de las agresiones se producen por trastornos de este tipo.
En concreto, en el Centro Penitenciario no hay un sólo psiquiatra para atender estas patologías. También reivindican -al menos- una unidad psiquiátrica específica cada Comunidad Autónoma, que tampoco existe en la actualidad.
Antonio Rodríguez lamenta que la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias “parece que tiene la creencia que nuestro trabajo debe llevar incorporado la aceptación de ciertos grados de violencia”.
Destaca el Delegado Sindical que el protocolo que se pone en marcha ante la existencia de agresiones, se limita al área de seguridad, por ello exigen que se aborde también desde la prevención, en base a la Ley de Prevención de Riesgos Laborales. Consideran que es fundamental que se estudien e investiguen estas agresiones por parte los servicios de prevención.
En definitiva considera que la reinserción es solo un concepto nominal, una declaración de intenciones y reclama que la seguridad y la custodia son la obligación de estos Centros, pero no menos que la reinserción de las personas detenidas que cumplen medidas de privación de libertad.