SB-Noticias.- La crisis de las microalgas, alimentada por el último NO-DO que desvinculó su proliferación de los vertidos de aguas negras sin tratar en nuestras costas, ha destapado una legión de periodistas ciudadanos dispuestos a contar nuestras vergüenzas, o, mejor dicho, las vergüenzas que quiere seguir ocultando el Gobierno de Canarias.
La crisis de las microalgas ha convertido a Fernando Clavijo en una especie de Presidente de Estado que acude a visitar sus tropas a El Líbano, realizar un «hereje» izado a media asta de la bandera catalana, participar en la multitudinaria manifestación de Barcelona contra el terrorismo islámico… pronto veremos cuantas odiseas más por el planeta nos tiene preparadas para seguir ocupando portadas, cueste lo que nos cueste, en los medios de comunicación locales, pero siempre de forma que ningún periodista indisciplinado y desafecto le pueda preguntar por las microalgas.
Mientras les dejamos el último reportaje ciudadano que acaba de aparecer por las rede sociales, acerca de un vertido -en este caso en tierra- en Güimar por la rotura de un emisario, les adelantamos el último estreno de esta temporada:
Un grupo de periodistas ciudadanos están rodando hoy un «timelapse» en Barranco Hondo, una técnica de grabación en vídeo que permite reproducir en pocos segundos escenas rodadas a lo largo de varias horas. Según nos indican el intrépido colectivo productor de documentales ciudadanos, han visto con sus propios ojos cómo se formaba un bloom de microalgas casi sobre uno de los emisarios censados en 2005 por el Gobierno de Canarias, y cómo se iba extendiendo caprichosamente en función de la brisa y las corrientes. En todo caso, las microalgas no parecieron venir de alta mar fijando el Nitrógeno del aire y consumiendo el hierro que trae la calima, tan ricamente. «Cualquiera diría que es justo al revés«, manifestó un componente del equipo de producción.
Un avance del timelapse:
De seguir activo el periodismo ciudadano con esta intensidad, la próxima semana Fernando Clavijo seguramente viajará a Corea del Norte para mediar en la crisis entre Trump y Kim Jong-un.