La empresa que excava en Arucas para el Cabildo de Gran Canaria el pozo de Tenoya para confirmar si fue empleado para arrojar a represaliados por el franquismo al inicio de la Guerra Civil ha encontrado huesos humanos pertenecientes a un número, por ahora, indeterminado de individuos.
Según han informado a Efe fuentes del Cabildo de Gran Canaria, se trata de fémures, tibias y otros huesos aparentemente humanos que fueron localizados ayer, lunes, a unos 34 metros de profundidad.
La excavación del Pozo de Tenoya comenzó el 28 de octubre de 2013, en un acto al que asistieron los entonces presidente del Cabildo de Gran Canaria, José Miguel Bravo de Laguna (PP); alcalde de Arucas, Ángel Víctor Torres (PSOE); y presidenta de la Asociación de Memoria Histórica de ese municipio, Pino Sosa, nieta de un comunista desaparecido que podría estar enterrado en ese lugar.
La empresa que la realiza, bajo supervisión de los servicios de Arqueología del Cabildo de Gran Canaria, es la misma que recuperó 24 cuerpos hace nueve años en el pozo del Llano de Las Brujas, otro de los lugares utilizados por los insurrectos contra la Segunda República para hacer desaparecer a las víctimas de la represión.
Los trabajos en Tenoya se han prolongado varios años porque han resultado más complejos de los que se esperaba, ya que los niveles inferiores del pozo estaban sepultados por todo tipo de residuos arrojados durante décadas a su interior, así como por los materiales arrastrados por las lluvias.