En otra fecha señalada para el orbe hispano, 6 de enero de 2017, festividad de los “Reyes Magos”, que marcan el fin de las fiestas de “Navidad” y Año Nuevo”, que en éstas últimas han sido teñidas de sangre en Europa por actos terroristas -con indicios de ser de “falsa bandera-, tuvo lugar, pasado el mediodía, hora local, en el sur de la Florida, en el aeropuerto de Fort Lauderdale, una nueva matanza que, al menos, se ha cobrado la vida de cinco personas y ocho heridos: “Un hombre armado, sin decir una palabra, se movió a través del reclamo de equipaje de los viajeros para recoger el suyo y tomar su arma abrir fuego hasta quedarse sin municiones, dejando cinco muertos y ocho heridos en el aeropuerto de Fort Lauderdale”…”El atacante fue identificado como de 26 años de edad, Esteban Santiago, de Anchorage, Alaska, que sirvió en Irak con la Guardia Nacional, pero fue degradado y dado de alta el año pasado por un rendimiento insatisfactorio.
Su hermano dijo que había estado recibiendo tratamiento psicológico recientemente. Un oficial de la policía dijo a The Associated Press que Santiago había entrado en la oficina del FBI en Anchorage en noviembre para decir que el gobierno de Estados Unidos estaba controlando su mente y haciéndole ver vídeos del estado islámico” (fuente de información:.https://www.apnews.com/2c96db79441640e58233819e65e33e07/Airport-gun…).
Es decir, después de los actos de terrorismo recientes y reiteradas matanzas en los EE.UU y en Europa, con el precedente del 11-S de 2001, un militar veterano, fichado por el FBI y con trastorno mental (provocado o congénito, pero eso sí detectado oficialmente, con anterioridad), puede viajar en avión, portando un arma de fuego y matar en un aeropuerto estratégico de los EE.UU. Increíble.
Ante todo esto, podemos estar tomando conocimiento, a través de las informaciones que nos van llegando, de un manual de cómo crear un terrorista, con formación militar previa, por los servicios de seguridad e inteligencia estadounidenes, para lograr fines de pánico, miedo, mayor represión, supresión de derechos cívicos, control social, desmovilización en la población e, incluso, como pretexto para intervenir militarmente en el exterior.
La barbarie de estado se ha instalado y es endémica en los países capitalistas de la OTAN. Su erradicación por el socialismo es necesaria para conservar el planeta y ser posible vivir dignamente, en paz, los seres humanos.