El presidente de NC desconfía de un Gobierno “sin programa ni equipo y en el que priman los intereses personales y partidistas”
El presidente de Nueva Canarias (NC), Román Rodríguez, afirmó hoy que el acuerdo entre CC y PSOE es un “paréntesis en la crisis permanente” del pacto de gobernabilidad, que se saldará con un “intercambio de estampitas” vinculadas con algún ayuntamiento y mayores partidas en los presupuestos de 2017. El líder de los nacionalistas de izquierdas mostró su desconfianza hacia un Gobierno “sin programa ni equipo y en el que priman los intereses personales y partidistas”. Rodríguez aseguró que Nueva Canarias mantendrá su labor de oposición crítica, exigente, alternativa y siempre en el intento de buscar acuerdos en favor de los intereses generales de las islas.
Tras anunciarse el acuerdo entre las direcciones ejecutivas de los socios, Román Rodríguez dijo que es la “confirmación de lo adelantado” por NC sobre la existencia de “dos únicas” opciones, la “continuidad de un mal Gobierno, dominado por CC y con un PSOE secundario y subordinado” que, desde el primer día de su constitución hace 16 meses, atraviesa una crisis permanente. La segunda posibilidad, continuó, el cambio de los socialistas por el PP.
Para NC, la decisión de mantener el pacto es un “paréntesis en una crisis permanente” que, en cualquier momento, volverá a “resurgir”. Román Rodríguez consideró que esta salida provisional se saldará con un “cambio de cromos, de estampitas” vinculadas con alguno de los ayuntamientos y la gestión de un mayor porcentaje de los presupuestos de 2017.
Rodríguez dijo que su formación política desconfía del gabinete presidido por Fernando Clavijo por tratarse de un Ejecutivo “sin programa ni equipo, en el que priman los intereses personales y partidistas y que está altamente deteriorado por las mutuas desconfianzas” demostradas.
La permanencia en los sillones” del poder, según el líder de los nacionalistas de izquierdas, son “más importantes” para CC y el PSOE que la resolución de los deteriorados servicios sociales, sanitarios y educativos y, entre otros, la puesta en marcha de las políticas destinadas a atender a los más necesitados.
Nueva Canarias, según su presidente, permanecerá, “como hasta ahora, al margen de maniobras especulativas” y en su labor de oposición exigente, alternativa y con el objetivo de buscar acuerdos cuando “se den las condiciones y sea posible”. La agenda “clave” para los nacionalistas de izquierdas es un presupuesto expansivo para el próximo año, que permita mejorar los servicios públicos, la inversión en obra pública; la reforma del sistema electoral, el freno a la tramitación del proyecto de ley del suelo para ser consensuado y la retirada de la proposición de ley de los barrancos de Güímar del Cabildo de Tenerife presidido por Carlos Alonso.