{mosimage}Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública.- Es sobradamente conocido que los presupuestos que las CCAA dedican a la Sanidad son un exponente de su preocupación por el sistema sanitario público, y que el actual modelo de financiación autonómico, al hacer transferencias globales a cada comunidad autónoma para atender todas las competencias recibidas permite a estas trasladar a los presupuestos su interés por la Sanidad y a la vez abre un amplio abanico de financiación por habitante y año entre todas ellas.
Los presupuestos para 2016 todavía tienen un cierto grado de indeterminación por lo que deben ser vistos con prudencia, porque 2 CCAA (Castilla La Mancha y Extremadura) no los han aprobado definitivamente todavía y otra (Cataluña) ni tan siquiera los ha presentado, por lo que las cifras finales pueden diferir de las que se presentan en el siguiente cuadro que recoge el presupuesto destinado a Sanidad por habitante y año.
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Con estas limitaciones hay que hacer algunas consideraciones:
1) Se produce un incremento en todas las CCAA (pendiente todavía del proyecto de presupuestos de Cataluña) sobre los presupuestos de 2015 (un 3,99% de promedio) pero todavía sin alcanzar los de 2010 (un 2,91% menos), por lo que aunque se evidencia una recuperación presupuestaria esta todavía es insuficiente para recuperarse de los recortes de la legislatura anterior.
2) De una manera global puede decirse que continua existiendo una diferencia excesiva entre los presupuestos por habitante de las CCAA (539 € de diferencia entre la de mayor y menor presupuesto por habitante) que necesariamente se expresara en un distinto acceso a las prestaciones sanitarias, fomentando la desigualdad entre territorios. Con todo la ratio entre el máximo y el mínimo presupuesto ha disminuido un poco respecto al año anterior (1,51 versus 1,54) y respecto a 2010 (1,52), lo que evidentemente es positivo.
3) Seis CCAA (Asturias, Baleares, Cantabria, Madrid, Navarra y Valencia) superan el presupuesto de 2010, aunque los casos son muy distintos. Asturias y Navarra estaban entre las que tenían un mayor presupuesto en 2010, mientras que Baleares, Madrid y Valencia estaban situadas en los tres últimos puestos en presupuestos por habitante en 2010, y Cantabria tenía una posición intermedia en ese año.
4) Por supuesto hay que tener en cuenta que la financiación es una parte del funcionamiento de la Sanidad porque con una gestión más eficiente pueden mejorarse los resultados y es bien conocido que la Sanidad Pública arrastra problemas importantes de eficiencia que deben abordarse con urgencia (política farmacéutica, privatizaciones, sobreutilización tecnológica, etc).
2) De una manera global puede decirse que continua existiendo una diferencia excesiva entre los presupuestos por habitante de las CCAA (539 € de diferencia entre la de mayor y menor presupuesto por habitante) que necesariamente se expresara en un distinto acceso a las prestaciones sanitarias, fomentando la desigualdad entre territorios. Con todo la ratio entre el máximo y el mínimo presupuesto ha disminuido un poco respecto al año anterior (1,51 versus 1,54) y respecto a 2010 (1,52), lo que evidentemente es positivo.
3) Seis CCAA (Asturias, Baleares, Cantabria, Madrid, Navarra y Valencia) superan el presupuesto de 2010, aunque los casos son muy distintos. Asturias y Navarra estaban entre las que tenían un mayor presupuesto en 2010, mientras que Baleares, Madrid y Valencia estaban situadas en los tres últimos puestos en presupuestos por habitante en 2010, y Cantabria tenía una posición intermedia en ese año.
4) Por supuesto hay que tener en cuenta que la financiación es una parte del funcionamiento de la Sanidad porque con una gestión más eficiente pueden mejorarse los resultados y es bien conocido que la Sanidad Pública arrastra problemas importantes de eficiencia que deben abordarse con urgencia (política farmacéutica, privatizaciones, sobreutilización tecnológica, etc).
En resumen, se produce un aumento de los presupuestos sanitarios de las CCAA, pero aún insuficiente globalmente para alcanzar los niveles de 2010, aunque la distribución del aumento ha sido variable entre las CCAA de manera que seis de ellas han superado los valores de 2010, evidenciándose también que se mantiene una gran diferencia entre los presupuestos por habitante y año de las CCAA, diferencia que estimamos excesiva, no justificada y lesiva para la cohesión y la equidad.