Comunicado de Las Plataformas de Afectados por Hepatitis C:
{mosimage}"Venimos observando, recientemente, la inclusión de publicidad de “paquetes turísticos” a Egipto para recibir los nuevos antivirales, exponiendo a los enfermos a un “posible tráfico” de medicamentos. En un principio, para no publicitar a la agencia de viajes, silenciamos en nuestras redes de comunicación externa la difusión de los artículos que contenían sus mensajes.
Las Plataformas hemos decidido manifestar públicamente nuestra opinión ante la extensión del anacronismo que supone que enfermos de países “supuestamente desarrollados” tengan que viajar fuera de la EU en busca de una curación que se les niega en su país de origen.
Las Plataformas no podemos seguir silenciando la indignación que sentimos ante “oportunistas” que se lucran tanto del miedo de los enfermos como de la ineptitud de un Gobierno que, a día de hoy, ha sido incapaz de gestionar correctamente este problema de Salud Pública.
Las personas que conformamos las Plataformas de Afectados por Hepatitis C llevamos mucho tiempo luchando para que todos los españoles tengan acceso a los nuevos tratamientos y vamos logrando, sólo en algunas CCAA, que las personas cuya infección está en fases muy avanzadas de la enfermedad (F4-F3) vayan siendo tratadas. Nuestro reto para 2016 es que todos los enfermos, independientemente del estadio de su enfermedad, accedan a los nuevos fármacos.
Las personas afectadas por el virus de la Hepatitis C pueden ponerse en contacto con la Plataforma de su ciudad o con cualquier Plataforma del país y nosotros denunciaremos su caso y conseguiremos, no tengáis la menor duda, que este paciente sea tratado dentro de nuestro Sistema Nacional de Salud (SNS) con todas las garantías que ofrece una Sanidad que, a pesar de los recortes que ha sufrido en los últimos años, sigue siendo una de las mejores del mundo, gracias, en gran medida, a la mayoría de los especialistas sanitarios que trabajan en ella.
Conocemos la incertidumbre por la que pasa un enfermo al que su Sistema Nacional de Salud le niega un tratamiento existente para curarse, por eso, conseguir los nuevos antivirales para todos los afectados es el origen y el objetivo de nuestras reivindicaciones. Bajo ningún concepto podemos aceptar que una agencia de viajes se sirva de una enfermedad para lucrarse, bajo un manto de bondad perversa, utilizando el miedo, el desconocimiento de la enfermedad y la irresponsabilidad de la gestión sanitaria. Pedimos a los pacientes que confíen en el trabajo que realizamos desde las Plataformas y que no caigan en redes de “encantadores de serpientes”.
Estos viajes solo se ofertan para F0 y F1 y desde las Plataformas podemos deciros que estéis tranquilos, que confiéis en las acciones que estamos desarrollando desde las Plataformas para presionar al Gobierno y a las multinacionales Farmacéuticas con el objetivo de conseguir que todos los españoles reciban su tratamiento en España, sin ser discriminados según su grado de enfermedad.
El derecho a la <protección a la salud> está reconocido en el artículo 43 de nuestra Constitución, <compete a los poderes públicos> y las Plataformas no cesaremos de luchar hasta que se cumpla. No vamos a entrar a valorar la ética con la que los “nuevos mercaderes” aprovechan las debilidades que ocasiona una enfermedad y las lagunas de nuestro Sistema Nacional de Salud, pero sí os pedimos a los enfermos que si queréis viajar a ese maravilloso país, podéis hacerlo por un módico precio, sin necesidad de poner en riesgo vuestra salud, y sin el peligro de que nuestro SNS tenga que corregir, en un presente o en un futuro patologías asociadas a fármacos que no han pasado ni el control de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS), ni por el consenso para suministrarlos de especialistas en Hepatología y Farmacia que son los que os monitorizarán para ver vuestra evolución.
Por cierto, si nuestro SNS tiene que corregir errores médicos asociados a esta modalidad turística, nos gustaría saber quién se responsabiliza de los efectos adversos que puedan presentar los pacientes: ¿la agencia en cuestión, un médico que se comunica vía email desde cualquier parte del mundo o nuestro Sistema Nacional de Salud? Finalmente, creemos que la “legalidad” de la que presume esta agencia de viajes debería ser “cuestionada” y analizada desde el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad.