Santiago Pérez asegura que “estamos viviendo la crónica de una crisis anunciada y añade que “los jerifaltes del PSOE y CC se empeñan en convertir esta crisis en una enfermedad permanente”.
El concejal lagunero exigió durante su intervención, en varias ocasiones tanto al PSOE como a Coalición Canaria “que quiten las manos de encima de La Laguna, que no se merece esto”.
Denuncia santiago Pérez que a La Laguna se le está tratando de imponer un gobierno en minoria , “fruto de un matrimonio forzado que ni cohesiona ni garantiza la estabilidad de la que tanto hablaron, tras las elecciones”. Un pacto que ha demostrado tener dificultades para realizar una acción de legislatura, donde los socios están desavenidos y que objetivamente va hacia el caos”.
Visiblemente molesto, Santiago Pérez responde a las declaraciones públicas realizadas el martes por los portavoces de POSE y CC, tras la reunión de la Mesa de seguimiento del Pacto: “Les digo a algunos de los gerifaltes que ayer dijeron que este es el gobierno adecuado para La Laguna, que se dejen de payasadas, que los laguneros somos personas inteligentes”.
Ealgunos dirigentes del PSOE padecen el “sindrome del colonizado”
Acusó asimismo a algunos dirigentes del POSE, de sufrir el síndrome del esclavizado (en referencia a la teoría de Frantz Fanon, sobre la dependencia enfermiza de los pueblos dominados) por entrar siempre en el juego de “esa maquinaria de poder que es CC”. “Es obvio -continúa- que CC está tratando de construir un búnquer para tener el control de los principales municipios de Tenerife, y Santa Cruz, Granadilla, Arona, Puerto de la Cruz y ahora La Laguna, son buenos ejemplos de ello.
En este sentido les recuerda a los líderes del PSOE canario, que el plazo que exigieron a CC para rectificar en el pacto suscrito con el PP en el ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife y en el Puerto Cruz ya ha finalizado, y Coalición Canaria no solo les responde con el desprecio, sino tomando estas medidas unilaterales en La Laguna, que para santiago Pérez no tiene otro nombre que el síndrome del esclavizado.
“La alternancia en La Laguna es una necesidad”
Insiste Santiago Pérez que el actual gobierno del municipio no refleja el resultado de las urnas, que fe un clamor para el cambio político. Considera que los laguneros votaron un cambio de gobierno, un gobierno progresista, encabezado por la candidatura más votada. Y aunque en ese momento no fue posible, la alternancia es una necesidad. “Desde la noche de las elecciones dije que nuestro grupo votaría por las diversas alternativas para poner a CC en la oposición. Y aunque preferíamos el pacto entre Unidos se Puede, PSOE y XTFE-NC, sin embargo hay otras “geometrías” posibles.
Pérez es partidario de diseñar un programa de cambio, que sea suscrito por los partidos que se pongan del lado de La Laguna, de la calidad democrática y no de este régimen que se cree que la laguna es su trono.
Bajos fondos en el ayuntamiento
Respecto al hecho recientemente conocido en referencia al funcionario que ha continuado percibiendo un sueldo, estando de baja prolongada (por estar en la cárcel) asegura que es a la Fiscalía que es a quien corresponde ahora investigar, pero asegura que hay muchos otros asuntos que comunicar a la Fiscalia.
Considera que en el ayuntamiento de Aguere hay muy buenos empleados públicos, pero también existen “unos bajos fondos” que tienen que ver con este episodio y que Coalición Canaria no los ha atajado.
Ana Oramas dejó a La Laguna en bancarrota
También recordó, que La laguna es un municipio con unas finanzas ahogadas, intervenido por el Ministerio de Hacienda hasta 2023 “por la falta de responsabilidad de la que fuera alcaldesa Ana Oramas” situación que obliga a los laguneros a contribuir un 20 % por encima de la media de los municipios canarios, “y eso -añade- solo sirve para devolver una deuda oculta, que afloró después de que Oramas pusiera pies en polvorosa”… En definitiva, una pésima gestión que hace que los vecinos de este municipio paguen en tiempos de crisis la irresponsabilidad en la gestión durante los tiempos de bonanza.