En estas circunstancias, lo más importante para el futuro es determinar si los ataques de París fueron organizados por entero en el propio país o si los agresores recibieron instrucción o ayuda desde el extranjero y, concretamente, del Estado Islámico o Al Qaeda, afirma la misma firma de análisis estadounidense.
Stratfor sostiene que los ataques en París tendrán con seguridad consecuencias políticas. Los trágicos sucesos se han producido cinco días antes de que el único portaaviones francés, el Charles de Gaulle, partiera para el golfo Pérsico a luchar contra el EI en Irak y Siria. Francia ya desarrolla una operación aérea en Siria desde septiembre de este año.
Desde una perspectiva política, los ataques son un recordatorio de las tensiones étnicas que se viven en Francia. Aunque el país se ha mantenido alejado de los intentos de detener el flujo migratorio en Europa, es probable que los acontecimientos en la capital den más apoyo a esta idea.
Por su parte, Marine Le Pen y su partido el Frente Nacional pueden aumentar a raíz de los ataques su popularidad por su programa contrario a la inmigración, al igual que ocurrió después de los atentados contra la revista 'Charlie Hebdo', informa Stratfor.
El propio presidente galo François Hollande también vio incrementar su popularidad tras el atentado contra los periodistas del semanario satírico por su reacción a los acontecimientos. Sin embargo, no se espera que se repita la tendencia ya que los ciudadanos empiezan a cuestionar la eficacia de las medidas antiterroristas aprobadas recientemente en el país.
El expresidente Nicolas Sarkozy, por su parte, también es conocido por su dura postura en materia de seguridad. Por ello, teniendo en cuenta los últimos sucesos, el líder conservador puede recibir el apoyo mayoritario de los ciudadanos en las elecciones de 2017.