{mosimage}SB-Noticias.- La justa reivindicación de adaptar la actual convocatoria de la Oferta de Empleo Público del SCS a las excepcionales circunstancias laborales, profesionales y asistenciales de Canaria desde antaño ha sido una exigencia que Intersindical Canaria ha venido planteando al Gobierno en los distintos foros de negociación con adverso resultado.
Como resultado de la nefasta política laboral del Gobierno, cerca de la mitad de la plantilla del Servicio Canario de Salud se encuentra sometida desde hace años a contratos precarios y eventuales. La inexistencia de convocatorias de oferta de empleo público de forma regular y continuada, colocan ahora a estos profesionales en una situación de desventaja frente a los aspirantes que sin experiencia se presentan a una oferta de empleo público en busca de una plaza en propiedad o un buen puesto en la lista de empleo.
El argumentario utilizado por el consejero de Sanidad para no modificar las bases selectivas de la OPE se torna en cínico si consideramos que la presente convocatoria, por negligencia reiterada de la administración sanitaria, concluirá unos 10 años después de haber sido inicialmente convocada, caso inaudito y sin precedentes. El Consejero Morera, por tanto, nos manda a la mar a por naranjas (cosa que la mar no tiene), y sin sonrojo nos remite a la “próxima” convocatoria de empleo para poder atender a nuestras peticiones, circunstancia esta por ahora irrealizable cuando es precisamente el Gobierno canario el mayor, vergonzante y sumiso cumplidor de las imposiciones de las medidas contra el déficit impuestas por Rajoy y el PP, entre ellas la prohibición de creación de empleo público, ello a pesar que Canarias cuenta con el menor número de trabajadores para atender mayor número de pacientes y usuarios, motivo por el que la actual convocatoria tendría que haber incluido al menos el triple de plazas de las que ahora oferta.
Para suma de males, en esta OPE contaremos además con la presencia de miles de foráneos que competirán deslealmente con los opositores canarios en un país en el que sufrimos los mayores niveles de desempleo del Estado y de Europa (30%). Tampoco este gobierno ha propiciado medida alguna para que los puestos de trabajo del SCS vayan a la gente de nuestra tierra. Así, los datos disponibles sobre el número de aspirantes inscritos para optar a plaza a este OPE producen escalofríos. : 33.000 inscritos para 1.234 plazas de Enfermeros; 18.000 para 913 plazas de Auxiliares de enfermería; y 42.000 aspirantes a 614 plazas de Auxiliares administrativos. Como podemos observar, un dislate tras otro.
En definitiva, insistimos una vez más en lo injusta e inapropiada de esta convocatoria que solo traerá mayores perjuicios a nuestra castigada sanidad pública, a sus usuarios y a sus trabajadores. Entendemos su solución pasa por una cuestión de voluntad política, buscando la forma en la que primar de mayor manera la experiencia profesional de los trabajadores de la sanidad pública que durante años han sido el sostén del servicio público de salud.