Javier Caso Iglesias. Analista Político y Social
{mosimage}Todas las encuestas que analizan los resultados de Catalunya Sí que es Pot apuntan en el mismo sentido, esto es: Catalunya Sí que es Pot, la marca electoral para el 27-S de la coalición entre Podemos e ICV, no lograría emular el tirón de Ada Colau, que consiguió desbancar a CiU y convertirse en alcaldesa de Barcelona. La marca de Podemos lograría solamente el 12’4% de los votos y alcanzaría entre 15 y 17 actas. Un resultado muy similar al que ICV-EUiA logró en las pasadas elecciones en Cataluña en solitario.
Un descalabro que a nadie se le escapa que se ha producido por esa mala praxis llevada a cabo en sus primarias (a cargos políticos e institucionales) excluyentes, con una lucha por la poltrona desalmada y sin cambio en el modelo de relaciones de poder en Podemos que ya los asemeja, sobre todo a los equipos CQP, a la imperante "casta"; así como por la falta de un discurso sólido y coherente. Los significantes flotantes y vacíos se le han vuelto en contra a Podemos. Lo mismo le está ocurriendo en Cataluña.
La percepción del proceso en Cataluña se percibe como de confrontación de dos bloques, el catalanista y el españolista, uno liderado por Mas-Junqueras y otro por Rivera-Albiol.
Se echa en falta una sólida posición federalista presidida por el sentido común frente a los extremismos de Mas-Junqueras y Rivera-Albiol. Ese era el papel que debería de haber jugado Podemos. Ese era el derecho a decidir que debería de haber defendido. No el derecho a decidir de los extremismos, sino el derecho a decidir del sentido común para conseguir un país más democrático y cohesionado a través de sólidos lazos federales y fraternales cimentados en derechos sociales y laborales de calidad para los ciudadanos.
Podemos no ha sido capaz de convencer a sus socios de Catalunya Sí que es Pot para construir un sólido discurso federal y solidario que evitara tanta confrontación extremista en Cataluña. Un sólido discurso que desactivara a los que esconden tras la bandera sus políticas austericidas y de recortes. Pues Mas-Junqueras y Rivera-Albiol son las dos caras de la misma falsa moneda. Las dos caras de un mismo sistema económico y financiero en el que siempre ganan los de arriba y perdemos la amplia mayoría de la ciudadanía.