Ha trasladado la propuesta al presidente de la Comisión en el Pleno del Comité de las Regiones
{mosimage}SB-Noticias.- El presidente en funciones del Gobierno de Canarias, Paulino Rivero, solicitó hoy al presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, la creación de una reserva de fondos de al menos 6.300 millones de euros para el Archipiélago en el marco del Plan de Inversiones de la Unión Europea para los próximos tres años, dotado globalmente con 315.000 millones de euros.
Dado que las RUP suponen aproximadamente el 4 por ciento de la población europea, deberían recibir el mismo porcentaje de los fondos del llamado Plan Juncker, según explicó el presidente canario. De la misma manera, Canarias debería recibir la mitad de esos 12.000 millones, porque su población supone el 50 por ciento del total de las RUP.
Rivero aseguró que esa reserva inicial de fondos podría pasar luego a la bolsa general si no se utilizasen, "pero necesitamos disponer de esa posibilidad para hacer frente a los problemas que tenemos planteadas las RUP, especialmente en materia de empleo".
La creación de esa reserva sería la constatación, a juicio de Rivero, del compromiso real de la Comisión con las regiones más alejadas de la Unión, más allá de los preceptos teóricos que contienen los diferentes documentos aprobados por el Ejecutivo comunitario al respecto.
"La Comisión tiene una magnífica oportunidad para concretar su voluntad de combatir las dificultades a las que se enfrentan las RUP con una disposición de fondos adecuada para invertir en materias en las que somos punteros y en las que podemos aportar mucho al resto de la Unión, como las energías renovables, los transportes, las políticas relacionadas con la gestión de los recursos hidráulicos o los programas de cooperación con los países de nuestro entorno", dijo Rivero.
El presidente explicó que cualquier otra orientación en la distribución de fondos no respondería a criterios de equilibrio y justicia con las necesidades de los territorios más alejados de la Unión, que, recordó, tienen reconocido el derecho a un tratamiento singular en los Tratados europeos. "Si nuestros territorios se ven obligados a competir con otros del continente no tendrían muchas posibilidades de desarrollar proyectos de importancia, con lo que una reserva de fondos sería fundamental para garantizar la equidad y la solidaridad entre las regiones".
El Plan Juncker y las RUP
En el pleno del Comité de las Regiones al que ha asistido Rivero se ha debatido el papel de las regiones y ciudades dentro del conocido como Plan Juncker, el Plan de Inversiones para Europa que aspira a movilizar 315.000 millones de euros en inversiones públicas y privadas en los próximos tres años a través del BEI, el Banco Europeo de Inversión.
Así, durante la celebración del mismo, se aprobaron las prioridades regionales y locales del Comité de las Regiones para el periodo comprendido entre 2015 y 2020, recogidas en un proyecto de resolución centrado en la creación de empleo, el crecimiento sostenible y la lucha contra el desempleo a nivel local.
En ese sentido, las Regiones Ultraperiféricas de Europa consideran imprescindible que ese nuevo Plan de Inversiones para Europa contemple el impulso de las economías locales y regionales, en consonancia con los cuatro ejes sobre los que pivota el objetivo de la Comisión Europea en materia de empleo: el impulso de la demanda de mano de obra; la mejora de la oferta de trabajo y de las cualificaciones; la mejora del funcionamiento de los mercado de trabajo y garantizar la equidad, combatir la pobreza y promover la igualdad de oportunidades.
Los representantes del Parlamento Europeo y del Consejo llegaron la semana pasada a un acuerdo sobre el modelo de financiación del Plan de Inversiones tras meses de negociaciones. El fondo contará con una garantía de 16.000 millones de euros procedente del presupuesto de la UE y de 5.000 millones aportados por el Banco Europeo de Inversiones (BEI).
La CE prevé que ese capital de base se multiplique por 15, gracias a la movilización de la inversión privada. Así, se estima que la garantía europea captará 240.000 millones de euros para inversiones a largo plazo y la del BEI, 75.000 millones de euros para inversiones a través de pequeñas y medianas empresas.