Emilio García Hernández. Profesor de Enseñanza Secundaria
{mosimage}Estamos viviendo un momento dulce para la izquierda en España, indistintamente cual sean las siglas de los diferentes partidos. La irrupción de PODEMOS en el panorama político ha puesto nervioso al PSOE al PP Y a los partidos nacionalistas de derechas.
PODEMOS ha abierto otra forma de hacer política, dando paso a los ciudadanos la oportunidad de elegir a sus candidatos y no a dedo como lo hacen los partidos antes mencionados.
Bien es cierto que otros partidos como I.U. Si Se Puede y otros partidos normalmente con ideología de izquierda, eligen a sus candidatos por el procedimiento de primarias.
La democracia es eso, participación, implicación en la vida que nos ha tocado vivir. Parece que quienes únicos se implican, participan y deciden son esos entes llamados mercados que no sé porque razón siempre salen beneficiados independientemente quien gobierne.
Sobre la mesa los partidos de izquierda siempre han querido luchar contra eso, ya lo decía Julio Anguita, con la formación de la nueva Europa nos encaminamos a la Europa de los mercaderes, pues bien aquí lo tenemos. Una Europa gobernada aparentemente por sus gobiernos, pero prácticamente gobernada por una minoría que designa el futuro del pueblo.
Tenemos un PSOE que ha sido cómplice de todo esto y al que no voy a mencionar mucho pues que las políticas neoliberales las aplique el PP me parece razonable, pero que las aplique el PSOE me parece atroz.
Tenemos ahora muchos movimientos de diferentes agrupaciones y formaciones políticas donde apenas hay diferencias en su planteamiento de base y sin embargo están mirando su ombligo más que la oportunidad de cambiar esto.
¿Qué podemos conseguir uniendo fuerzas y digo como I.U. PODEMOS, EQUO, SI SE PUEDE, ETC.?, pues bien se puede conseguir todo aquello que llevamos esperando tantos ciudadanos.
¿Qué pasaría si no nos unimos?.
Pues que nos seguirán oprimiendo aún más. La desunión de la izquierda será la responsable de que sigan habiendo desahucios, que la gente no pueda pagar la factura de la luz, seguirá distanciándose la clase millonaria de la clase más pobre, desaparecerá la clase media, no tendremos sanidad y educación pública, es decir curarse o estudiar será cuestión del dinero que tengamos en la cuenta. Aumentará la esclavitud, y lo peor de todo que no se vislumbrará nada para tratar de revertir esto.
La unión de la izquierda nos dará más libertad, las clases sociales serán más igualitarias, la nacionalización de las empresas que antes eran de todos los españoles como Endesa, telefónica, AENA, Repsol, Cepsa, etc. Todas ellas muy rentables, cuyos beneficios revertirán en la sociedad española.
Con más colegios, más hospitales, mejoraríamos en muchos servicios sociales y seguro que los gobiernos invertirían más en cultura que en obras para favorecer a sus amigos.
Me igmagino a Pablo Iglesias de presidente del gobierno y a Alberto Garzón de ministro de economía y hacienda.
Si ahora no gana la izquierda de verdad, no la del PSOE, y vuelve a ganar el PP, tendremos más ajustes, más recortes, más precariedad laboral, en definitiva aumentará la esclavitud. Volveremos al feudalismo donde una clase privilegiada tenía el poder de todo y el resto sólo podían trabajar.
¿Esto es lo que queremos? A qué estamos esperando? Cuanto más tiempo estén estos políticos de la casta en el poder más expolio de lo público habrá, los ciudadanos no seremos ni dueños de nuestra propia vida.
Dicen que el comunismo nos condiciona nuestra forma de vida, ¿Acaso el capitalismo no nos ha condicionado nuestra forma de vivir???. Induciéndonos a un consumismo puro y duro. Haciéndonos creer que cuanto más tenemos mejores y más importante somos.
Quién no ha hablado de alguien y si éste tiene bastante capital las primeras o la primera referencia que se da es: “este tipo tiene pasta”. Como si eso fuese un factor más que positivo para esa persona, independientemente de cómo la haya conseguido.
No quiero decir que todas esas personas se hayan enriquecido ilegalmente, pero poner por delante que alguien tiene dinero en nuestra sociedad parece que se le exonera de toda culpabilidad.
Esto es una de las cosas del capitalismo, que se valora más a las personas por lo que tienen que por lo que son.
Es por lo que apelo a la unión de la izquierda donde pongamos las cosas en su sitio sin interponer los intereses de los mercados a los elementos fundamentales de los ciudadanos.
Dejémonos de mirar en que puesto voy, con qué siglas o que sillón ocupo. Oigo hablar a muchos políticos de izquierda que dicen que lo importante es el proyecto, pues bien llévenlo a cabo.