EL BAR DE PEPE
Joaquín Hernández
{mosimage}Pues no sé qué decirles, yo cada día estoy más convencido que estamos viviendo en un país sin pudor, donde las personas carentes de honor, miran hacia otro lado para evitar el bochornoso espectáculo que, día a día, nos brinda la insoportable y nauseabunda clase política. De otra forma no se podría comprender como es posible las maniobras de cantidad de trepas y jetas que, con permiso de los propios, se encaraman dentro del partido para conseguir lo que con su propio curriculum político han sido incapaces de lograr.
Uno de los casos más llamativos de estos personajes, nada raros en el zoo político nacional, es el del llamado “caballo de Troya” de Fernando Sabaté en el partido Podemos en Tenerife.
Pues resulta que D. Fernando Sabaté, fundador y líder de un partido de corte local llamado Si Se Puede, habiéndose presentado en un par de ocasiones a las elecciones autonómicas con un resultado raquítico (18 concejales en 10 de los 32 municipios de la isla) y habida cuenta de su segura desaparición del panorama político isleño, sin encomendárselo a nadie empezó a construir un enorme caballo de papel (similar al caballo de Troya) que diera cobijo a una docena de adláteres de su partido para acabar dentro del centro del emergente partido de izquierda Podemos y dominarlo a su antojo. Así desde el mismo centro de Podemos y con un acuerdo firmado con la cúpula del partido en Madrid, los “troyanos” de Podemos asistieron a la invasión de Si Se Puede que con alevosía y premeditación fueron colocándose en lugares estratégicos para dar el salto o mejor dicho; el asalto al poder.
A esto, que ahora se da en llamar “doble militancia”, hace unos años atrás se le llamaba transfuguismo político, o sea el jeta o trepa que salía de su cubil para instalarse en mejor lugar y con más pasta gansa que en el fondo es lo que mueve a esta especie de “humanoide político”. Es evidente que nos encontramos ante la alimaña política más fascinante que existe en el zoo nacional, normalmente no tienen escrúpulos, repiten el mismo discurso, siempre copiado al canto de sirenas de la izquierda de toda la vida, la solidaridad con el desvalido, la lucha contra el capitalismo, el neoliberalismo, bla bla bla… en el fondo, y al igual que los camaleones, cambian ese discurso y dependiendo el marco donde se encuentre pueden aparecer como un progresista de derechas de toda la vida. Hijo de familia adinerada y carca se hace pasar por la “oveja negra” del escudo familiar pero eso también es falso, porque en el fondo al Jeta igual que el Trepa sólo quiere el poder, se vuelven locos por una poltrona donde se maneje un buen presupuesto y les da igual si antes negaron lo que ahora quieren jurar.
Por otro lado siempre nadan y guardan la ropa, tienen ese don de ubicuidad, tanto es así que es el caso de Si Se Puede en Tenerife donde su secretario general Sr. Sabaté es al mismo tiempo cabeza de lista para el Cabildo de Tenerife por la formación que lidera Pablo Iglesias: PODEMOS.
Un buen guión para una película de la saga de la escopeta nacional de mi admirado Berlanga, si no fuera por la tomadura de pelo que estos individuos cometen con sus escasos 10 mil votantes que confiaron en Si Se Puede como opción de gobierno en 10 municipios de la isla y que con cara de gilipollas admitirán que han sido utilizados, mangoneados y puteados con el único objetivo de alcanzar una mejor poltrona dentro del Cabildo Tinerfeño.
Por primera vez en 40 años desde la muerte Franco, estás elecciones se tendrán que mirar con lupa las listas, una a una, no vale votar las siglas, habrá que leer cada uno de los candidatos que conforman las planchas a las municipales, autonómicas y cabildos en Canarias, y en las demás regiones pues más de los mismo. No nos “podemos” fiar ni de nuestra sombra. Espero que los votantes sepan muy bien que un cambio es necesario y urgente, pero que no buscamos recambios del PP y Psoe, queremos regeneración política, nuevas personas con ganas de servicio a los españoles y por ende a España, acabemos con esta dictacracia y comencemos de cero, esta es la solución para conseguir una democracia real y participativa.