El PNV, con unos 350.000 votos retrocede ligeramente, aunque seguiría siendo la formación política más votada con el 30'5 % de los votos validos. Sin embargo, necesitaría a Podemos o a dos de las otras formaciones principales para garantizar la estabilidad de gobierno, ya que sólo conseguiría entre 22 y 23 de los 75 escaños del parlamento vasco. Seguiría siendo la primera fuerza política en Bikaia, segunda en Alava y tercera en Gipuzkoa.
La única alternativa viable de gobierno sería, según indican los responsables del Euskobarometro, un gobierno de izquierda, encabezado por Podemos, con apoyo de EH Bildu y el PSE.
Podemos, obtendría 300.000 votos, un 25'6 % del total, y entraría en la Cámara de Vitoria con 21 o 22 escaños. Ganaría en Alava, empataría en Gipuzkoa con EH Bildu y sería la segunda fuerza en Bizkaia.
Retroceden en cambio EH Bildu, que se quedaría con 13 o 14 escaños y el 19'7 % de los votos; el PSE-EE, que conseguiría 10 escaños con el 12'9 % de los votos; y el PP, que obtendría 6 escaños con el 8'1 % de los votos. UPyD, con un 2'2 % de los votos validos, podría conservar su actual escaño por Alava, mientras que Ezker Anitza, con el 3'2 % de votos en Euskadi no entraría.
El 70 % de los entrevistados dicen tener ya decidido su voto, mientras que los indecisos son el 25 % y se detecta una caida importante de la fidelidad de casi todos los electorados. Se espera una alta participación, del 67 % impulsada por una elevada movilización ciudadana, sobre todo de los jóvenes y del electorado de la izquierda.