Pedro González Cánovas. Miembro de Alternativa Nacionalista Canaria (ANC)
{mosimage}Cuando se han abierto las autopistas de la información, le duela a quién le duela, y nos enteramos igual de lo que pasa en Argentina que en Barcelona, con solo buscar un poco en Internet, da la sensación de que nos tratan como tercermundistas o se burlan nosotros.
La retórica profesional política que ejercen sus cabecillas juega a contentar a todo el mundo, cayendo en continua contradicción su discurso. En Argentina critican a las empresas españolas y otras foráneas hablando de "neocolonialismo", no se atreverían a hacer ese discurso en España, poniendo como ejemplo a Argentina y las empresas españolas. En Cataluña ha desembarcado el secretario general de este partido, hablando del "derecho a decidir" de los Catalanes. En Euskal Herría o Canarias ¿también lo haría?
En Canarias, en el referéndum sobre la entrada en la OTAN mandó un rotundo no a la Alianza Atlántica Militar. Sin embargo hoy somos la mayor base geoestratégica de los militares de la OTAN por debajo del sur de Europa. Se nos utiliza como campo de entrenamiento, como punto de abastecimiento o como trampolín para mandar tropas a otros países africanos. Y no sabemos cuántas veces se habrá hecho como punto de escala trasatlántica para misiones secretas.
En Canarias, Podemos no tiene el valor de hablar de neocolonialismo o colonialismo, no va a acusar a ninguna empresa española de sobre-explotación, ni a mencionar algo parecido al derecho a decidir del Pueblo Canario. Por el simple hecho de que son españoles que van a seguir explotando cruelmente este Archipiélago, como lo han hecho siempre.
Desde España, el caso de Canarias se reduce a una cuestión económica. Mientras la balanza fiscal se incline a su favor, mientras el dinero que se devuelve en forma de subvenciones acabe desviando partes hacia otro lado, favoreciendo el silencio especulativo, o siga siendo un mercado donde vender su excedente (aunque sea con precios por debajo de costes), tiene justificación económica la colonia.
Además, está un beneficio por alquiler y venta, o de alquiler con opción a compra, con el que España mete en el Archipiélago muchos intereses internacionales. No sólo los de la explotación de hidrocarburos, o los propios castrenses que además nos convierten en objetivo militar permanente, casi en zona de guerra. Además, por otro lado, cada vez que España habla de intereses científicos internacionales concentrados en Canarias, vendiendo nuestra agraciada situación geográfica, negocia con nuestro cielo, con nuestro mar y todo nuestro territorio y riqueza natural, como antes lo hiciera con Cuba o el Sáhara. Con la clara intención de embargar nuestro futuro y seguir sacando beneficio de aquí hasta cuando no seamos España.
En Canarias tenemos opciones ciudadanas asamblearias que además pueden ser independentistas y nos guiarán hacia la emancipación como Pueblo. Ya va siendo hora de que tomemos noción de la realidad y comencemos a forjarnos un futuro propio.