Se queda sin palabras, lamentándose, porque el culpable en la Guardia Civil de dar la orden de no dar información a la policía no será sancionado
{mosimage}SB-Noticias.- Rafael Hernández, portavoz de Alternativa Sindical de Policías (ASP), reflexionó para La Trapera de Radio San Borondón, sin tapujos y con la verdad por delante, sobre el acontecimiento acaecido en torno a la orden emitida por la Guardia Civil para que no se diera información a los demás Cuerpos de Seguridad del Estado sobre el presunto asesino de un taxista rudo en el Sur de Tenerife.
Rafael Hernández pide a la Delegación del gobierno en Canarias que tome medidas en el asunto, pero teme que en este país siempre caen los mismos, como en el caso de la compañera muerta en la península por no llevar chaleco antibalas y el otro compañero en estado grave.
Recuerda que el sindicato lleva desde el 2011 luchando para que doten al Cuerpo de chalecos individuales antibalas e insiste en que se queda sin palabras y perplejo ante estas declaraciones, ya que un profesional de la policía en un comunicado, no transmite eso, nunca, no se debe hacer y habrá que buscar responsables: “Los altos mandos se cargarán al mensajero, buscarán a quien filtró la información, se destinarán guardias civiles, funcionarios, presionarán a los periodistas para dar con él, pero no se hará nada con el que ordenó ese comunicado lamentable, que está poniendo en peligro la vida de cualquier ciudadano y la de los profesionales de la policía Nacional o de cualquier Cuerpo”. Como cojan al mensajero nos garantiza que “se le acabará su carrera profesional, se lo cepillarán a él y a su familia, le expedientaran y le sancionarán en vez de condecorarlo con la medalla al mérito retribuida”.
Lamenta que en este país solo se venda humo, restricciones, recortes, ya que no hay dinero para cuestiones esenciales como los chalecos, pero para las condecoraciones nuevas del Cuerpo, sí. Bastante enfadado cuenta que a raíz de la muerte de su compañera aparecieron ayer en la Policía de Puerto de la Cruz unos chalecos preguntándose cómo es posible que aparezcan algunos, no todos, y ahora, si los tenían guardados, escondidos… “Este ministerio tiene una dejadez intolerable” y espera que en las próximas elecciones la gente reflexione y este Gobierno se vaya, ya que “es un Reino de Taifas: nosotros somos la cúpula, nos protegemos y a los trabajadores normales, policías que se juegan la vida, pues ni caso”.