Sánchez dice que Rajoy ya no puede liderar la lucha contra la corrupción y Lara pide la dimisión de Rajoy y Cospedal por "responsabilidades políticas" en la Gürtel
{mosimage}Público.- "España no está corrompida". Así de tajante se ha mostrado el presidente del Gobierno al presentar sus medidas de "regeneración democrática" este jueves en el Congreso. Para Mariano Rajoy, que ha dicho entender "la indignación" de los ciudadanos, los casos de corrupción son sólo una manzana podrida en el frutero. Un frutero que está sano y "hay que recordarlo", ha defendido.
Aunque ha reconocido que algunos casos han afectado a miembros de su partido, a personas de su "confianza", defendió que la mayoría de representantes de los ciudadanos "son personas decentes".
De hecho, defendió que "si afloran hoy tantos casos es porque se están combatiendo y las instituciones funcionan" y que "todo lo que sale a la luz habla más del pasado que del presente". E hizo un llamamiento a todos los miembros de la Cámara a no contribuir a sembrar "la desconfianza generalizada". "Se comienza generalizando la corrupción, se culpa a los políticos, se sigue con la propia política y se acaba señalando al sistema", espetó en una clara alusión, aunque sin citarlos, a Podemos. "A partir de ahí no queda espacio más que para los salvapatrias de las escobas, cuyo único programa político consiste en barrer, con las consecuencias de todos conocidas", agregó. "Sería un contrasentido que, quienes nos hemos propuesto regenerar la democracia utilicemos la lucha contra la corrupción, no para fortalecer las instituciones, sino como coartada para desestabilizarlas", zanjó.
"Si afloran hoy tantos casos es porque se están combatiendo y las instituciones funcionan" Con todo, el presidente defendió los proyectos de ley que hoy se debaten en la Cámara baja (Financiación de Partidos y la del Estatuto del Cargo Público, entre otros) como la solución para lograr "reducir la corrupción al mínimo nivel". "Nadie puede garantizar que pueda eliminar la corrupción en el planeta, pero sí castigarla con severidad", sentenció.
Así, aseguró que el Ejecutivo estaba dando una "respuesta amplia, firme y duradera" al problema porque, dijo, "toda corrupción es corrosiva, lesiona la democraica y desacredita a España". "Un país debe perseguirla tan pronto como aparece y por eso vamos a ser previsibles y corregirla", agregó. "Hoy es más difícil corromperse en España que antes de que nos confiaran el Gobierno", presumió, "y lo será mucho más cuando se aprueben estas reformas", mitineó, advirtiendo de que el PP usará el rodillo de su mayoría para aprobarlas sí o sí, diga lo que diga la oposición.
Entre las citadas medidas se encuentran las presentadas ya en febrero y que se han ido retrasando hasta ahora, cuando quedan pocos meses para las elecciones municipales y autonómicas y que los escándalos no dejan de sucederse, como el propio Rajoy recordó, en las primeras páginas de los diarios. El presidente busca ahora "que quien la haga, la pague" y para ello el grupo popular ha añadido enmiendas a la Ley del Control Financiero de los partidos políticos, así como a la ley que regulará el Estatuto del Alto Cargo.
"Hoy es más difícil corromperse en España que antes de que nos confiaran el Gobierno" En la primera de ellas, además de "prohibir las donaciones de personas jurídicas a los partidos", limitar la condonación de deudas y obligar a todas las formaciones a hacer públicas sus cuentas, los conservadores incluirán "que los particulares no puedan hacer donaciones a los partidos que superen los 50.000 euros" y que toda cantidad superior a 25.000 haya que publicarla en la correspondiente página web, incluyendo la identificación del donante. Asimismo, incluirán un plazo máximo de cuatro años para renovar las direcciones de los partidos, medida que todos deberán incluir en sus estatutos.
En cuanto al estatuto del Alto Cargo de la Administración Pública, se regulará el acceso a tales puestos imponiendo que se carezca de antecedentes penales, publicar sus retribuciones y bienes, así como a certificar que paga debidamente sus impuestos, eliminar las tarjetas como medio para abonar los gastos de representación y reforzar el control de incompatibilidades con una oficina que se encargue expresamente de ello.
A estas propuestas, Rajoy añadió otras dos como parte de su campaña: la reforma del Código Penal y la de la Ley de Enjuiciamiento Criminal, que buscan agravar las penas de inhabilitación, aumentar los plazos de prescripción de los delitos relacionados con la corrupción, obligar a los culpables a devolver "cuanto antes" los bienes que "el delicuente esté obligado a devolver" y acelerar los "macroprocesos" para evitar que permanezcan "abiertos durante años" extendiendo la idea en la sociedad de que la corrupción es continua y eterna.
"Espero que [todo ello] resulte abrumador para quien en un futuro pueda caer en la tentación de traicionar la confianza de los ciudadanos", manifestó Rajoy, vendiendo que estas medidas no pretenden "salir al paso de escándalos coyunturales", sino "llegar al fondo del problema", concluyó.
Le recuerda que tiene un tesorero en la cárcel, se sienta en una sede pagada con dinero negro y se han pagado sobresueldos desde una caja B
Pedro Sánchez, en su intervención en el debate sobre los dos proyectos de ley del Ejecutivo para combatir la corrupción, pidió al presidente del Gobierno que asuma su responsabilidad por el denominado caso Gürtel.
Para el líder socialista, este caso de corrupción, "del que no da explicaciones ni asume responsabilidades de ningun tipo" hace que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, "no esté capacitado, ni legitimado, ni en condiciones para liderar la lucha en España contra la corrupción".Sánchez empezó su intervención recordando la reciente dimisión de la ministra de Sanidad, Ana Mato, precisamente por el "caso Gürtell", y reprochó a Rajoy que no hiciera ni una sola referencia en su intervención inicial.
Pero él sí afirmó al presidente que "el cese" de la ministra está implicando directamente al Partido Popular, y recordó que el auto judicial "apunta al PP de la misma forma que lo hace con Ana Mato como partícipe lucrativo". Por ello, volvió a instar a Rajoy que algo deberá responder como presidente también de los populares. El lider socialista recordó también que el presidente empezó diciendo "que todo era falso, luego que todo, menos algunas cosas, y hoy ya se sabe que todo era cierto", indicó.
"No todos tenemos a un tesorero en la cárcel, ni una sede pagada con dinero negro", ha espetado Sánchez a RajoyEn cuanto a las reformas presentadas por el Ejecutivo para luchar contra la corrupción, Sánchez las consideró muy poco ambiciosas y, aunque admitió que podrían coincidir en algunas medidas a lo largo de la tramitación parlamenaria, aseguró que se quedan cortas y, sobre todo, que hay poca ambición democrática. "La crisis de la democracia se combate con más democracia", afirmó.
Luego, el dirigente del PSOE defendió el texto alternativo que presentan los socialistas, donde desgranó las medidas que ya ha hecho pública en más de una ocasión: prohibición de indultos a cargos públicos condenados por corrupción, endurecimiento de las incompatibilidades, reducir al mínimo el aforamiento, endurecimieno de todas penas por corrupción, etcétera.
Sánchez, como hizo Rajoy, también alertó de la actual crisis política que vive el país e instó a la necesidad de una regeneración democrática profunda y de verdad.El líder del PSOE nevegó en su intervención en todo momento entre dos aguas, y a muchos diputados les pareció blando y condescendiente con el presidente del Gobierno, teniendo en cuenta la difícil situación política en la que Rajoy afrontaba este debate.
"No se puede citar a Mato más que una vez, ni dejar de recordar que estas medidas ya las ha anunciado Rajoy varias veces y no ha hecho nada", afirmó a Público un compañero de escaño de Sánchez, a quien no le gustó nada su intervención.
"¿Quién va a asumir la responsabilidad política en su partido, además de la penal, por haber sido partícipe de la Gürtel? ¿Usted, señor Rajoy, o la secretaria general, María Dolores de Cospedal?". El coordinador federal de IU ha cargado duramente contra el PP durante el pleno del Congreso de este jueves, pidiendo la dimisión del presidente del Gobierno y de la secretaria general del PP. Lara, igual que intenta aplicar en su organización con el caso de Caja Madrid, exige al PP responsabilidades políticas por haber permitido y amparado la corrupción en una "lista interminable".
Lara ha recordado a Rajoy que son "cientos" los imputados y varios los condenados por irregularidades en el seno del PP, empezando por su extesorero, Luis Bárcenas, pasado por Francisco Camps, Jaume Matas o Carlos Fabra. "No son algunos sinvergüenzas, sino bandas organizadas para enriquecerse que están en el corazón del su partido y que han llegado al Gobierno", ha asegurado.
Para la Izquierda Plural, la regeneración democrática que vende el Gobierno no es más que humo. "¿Piensa que los ciudadanos somos idiotas? ¿Quién se va a creer su regeneración?", ha preguntado Lara después de criticar que son muchas las iniciativas contra la corrupción, comisiones de transparencia y comparecencias en sede parlamentarias las que el PP ha vetado con su rodillo parlamentario. "¿De qué regeneración nos viene a hablar? Se está riendo de todos los españoles", ha añadido.
El coordinador de IU ha insistido en que su grupo parlamentario ha presentado 45 medidas contra la corrupción y el fraude fiscal que "están a disposición del Gobierno", entre ellas el retraso de la prescripción de los delitos de fraude y evasión de capitales. Sin embargo, e opinión de Lara, ni el Gobierno ni el PP "tienen autoridad ni credibilidad" para plantear este debate, "porque han hecho oídos sordos a todas las peticiones sobre un pleno monográfico sobre corrupción".
"La regeneración democrática necesita transparencia", ha defendido. Algo de lo que carecen PP y PSOE, ha dicho, tras el acuerdo entre ambos partidos para no publicar la totalidad de los viajes de los diputados a cuenta del Congreso. "No tienen voluntad de luchar contra la corrupción, sólo presentan medidas cosméticas para que a los ciudadanos se les pase el cabreo", ha afeado Lara.
En la misma línea se ha pronunciado el portavoz de ICV-EU, Joan Coscubiela, que ha criticado que Rajoy "no afronta los problemas hasta que le explotan en cara, cuando no tiene más remedio", y que, cuando lo hace, "intenta cerrarlos en falso", como su comparecencia el pasado 1 agosto de 2013 cuando Rajoy compareció en el Senado tras el caso Bárcenas.
"Se ha equivocado mil veces, y cuando un error se repite tanto, deja de ser un error y se convierte en una opción. Se ha equivocado con una lista interminable de personas. Usted ha dado amparo, cobijo e impunidad a los corruptos", ha remarcado Coscubiela, que ha tildado al presidente del Gobierno del "míster X de la corrupción". "Asuma que no puede abordar la regeneración democrática que este país necesita.
El Bloque Nacionalista Galego y Amaiur han afirmado en el Congreso de los Diputados que la dimisión del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, debe seguir a la de la ministra de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Ana Mato, y le han acusado de no querer erradicar la corrupción.
Durante su intervención en el Pleno de la Cámara Baja, la diputada del BNG Olaia Fernández Davila ha señalado que Rajoy debería renunciar a su cargo y convocar elecciones por haber mantenido hasta ahora una "numantina defensa, incomprensible para la ciudadanía", de la ministra pese a que la oposición ya pidió su dimisión en febrero de 2013.
"Mira para otro lado y no actúa frente a la inmensa corrupción que afecta a su partido", ha recriminado a Rajoy la nacionalista gallega, cuyo partido ha solicitado la devolución de los proyectos defendidos por el Gobierno por considerar insuficientes las medidas propuestas. Por ello, ha puesto en duda la "credibilidad" de Rajoy y se ha preguntado de qué regeneración habla teniendo en cuenta que "la corrupción campa a sus anchas" en el PP.
Por su parte, el diputado de Amaiur Xabier Mikel Errekondo ha dicho al presidente del Gobierno que ahora que ha reconocido que Ana Mato ha "traicionado la confianza" de la ciudadanía, "la cabeza que se tambalea en el aire es la suya", y por eso le ha instado a dimitir, algo que considera que debería haber hecho hace tiempo.
Además, ha acusado al PP de no tener realmente la intención de acabar con la corrupción, sino de únicamente "poner un poco de barniz" y "ocultarla echando balones fuera". Tras referirse a las prácticas corruptas ilegales, Errekondo ha preguntado a Rajoy cómo va a combatir "la corrupción blanca, la legal", y ha dicho que la solución pasa necesariamente por "la ruptura democrática con el Estado corrupto".
Por parte de Compromís-Equo, Joan Baldoví ha afirmado que el plan del líder del Ejecutivo contra la corrupción suena a "pura cosmética", pero le ha advertido de que las arrugas del PP "son muy profundas" y no desaparecen con una "crema milagrosa".
En su opinión, Rajoy no tiene "autoridad moral" para hablar de medidas de transparencia, "sobre todo en la financiación de partidos", y por ello ha dudado de la posible eficacia de sus propuestas para erradicar la corrupción.