El Bar de Pepe
Joaquín Hernández
{mosimage}Mariano Rajoy apareció ante sus señorías triste y compungido, acojonado por las turbulencias que sufre la nave del Partido Popular y aplicando la Ley de Murphy nos dijo que “lo que tiene que ocurrir, ocurrirá…” y emulando a Juan Carlos I “el follador” pidió perdón a los españoles por tanto político ladrón y tanto choriceo institucional.
Luego ejerciendo al mejor estilo gallego continuó con aquello de si subo o si bajo, si ya pero ustedes peor… o sea que en ese aspecto seguimos igual que cuando Felipe Gonzalez decía aquello de un huevo, dos huevos, tres huevos… y se quedaba tan pancho, en está ocasión el nuevo líder del Psoe cargó el fusil y disparó a bocajarro hacia el banquillo azul y la contundente respuesta de los peperos no se hizo esperar y esta vez no fue una andanada de perdigones, Rajoy atacó con mala leche, premeditación y alevosía y lanzó el misil de los famosos ERE en Andalucía dejando a Pedro Sánchez herido de muerte.
Lo mismo ocurrió con el representante de Izquierda Unida, Cayo Lara también preparó sus armas y salió al ruedo del Parlamento y en plan picador intentó colocar la pulla donde más duele, los casos Bárcena, Gurtel, sobres blancos dinero negro, De Granados, etc. pero… cuando salió al coso taurino de la plaza de la Carrera de San Isidro, el Matador Rajoy parecía que había esperado al toro de 700 Kg de Izquierda Unida a puerta gayola y haciendo requiebro, evitó con maestría los afilados cuernos de Cayo Lara y otra vez salieron los ERE y el mamoneo de 1.200 millones de euros de los españoles y especialmente de los andaluces, las tarjetas black de Caja Madrid, etc. y así con CiU y demás. La leche se la repartían entre unos y otros y el ventilador esparcía la mierda política por doquier, tanto es así que algunos partidos ante la posibilidad que les alcanzase alguna colleja se dispusieron agradecer al Sr. Presidente del Gobierno su valentía al pedir perdón en nombre y representación de tanto ladrón, corrupto y malvado hijo de su madre que al amparo de una cosa llamada Dictacracia nos roban impunemente. El asqueroso y vomitivo espectáculo con la claqué de cada partido aplaudiendo las intervenciones de sus “cabezas de serie” parecía kafkiano, “nosotros somos hijos de puta, pero tu madre es más puta que la nuestra…” y así de unos a otros, mientras eso ocurría la Guardia Civil y Policía Nacional registraban las dependencias de Ayuntamientos de media España buscando más mierda que repartir.
El Sr. Rajoy y su ley o sea la Ley Rajoy, basada en el perdón de los pecados y el propósito de enmienda, no sirve para nosotros. Los españoles no queremos que nos pidan perdón, nosotros no absolvemos a nadie, no somos jurado, solo somos afectados, sufridores de tanta maraña de gentuza, las verdaderas víctimas de tanta mafia política.
Los españoles no esperamos que Rajoy ni el Rey nos pidan perdón, los españoles necesitamos que la Justicia funcione y funcione bien. Sin privilegios ni aforamientos, que todos seamos iguales ante la Ley y desde el primero hasta el último se sienten en el banquillo de los acusados y se les juzgue con rapidez y si son culpables vaya a la puta trena durante el tiempo que se considere de acuerdo con el delito cometido. Que se devuelva al pueblo el dinero robado y se destierre a todo aquel que, defraudando la confianza del pueblo, no merezca llevar el titulo la condición de español.
Nosotros, los españoles estamos hartos de milongas sentimentales, de buenas intenciones y de “leyes de transparencias” que solo sirven para justificar lo injustificable. ¿De qué nos sirve el perdón de Rajoy? ¿Qué intenta pidiendo perdón? ¿Ganar la confianza de tantos perjudicados por las estafas, de tanto suicidio por los desahucios cometidos por “entidades financieras mafiosas? ¿Por obligarnos a los españoles a pagar las estafas de ese asqueroso clan de gánster llamados banqueros aportando más de 60 mil millones de euros mientras nos quitaban presupuesto de salud y educación? ¿Pedir perdón al 30% de los españoles en el umbral de la pobreza por culpa de oscuros intereses económicos? ¿A los 6 millones de parados de los que 1,9 millones no disponen de ninguna prestación social? ¿A los jóvenes que han emigrado?
Con todos mis respetos Sr. Presidente y como decimos los canarios…¡¡Mandase a mudar y váyase al carajo!!