{mosimage}SB-Noticias.- En relación sobre las reiteradas manifestaciones de Gobierno canario, luego repetidas por el Parlamento, afirmando las plenas condiciones sanitarias para atender cualquier crisis por Ébola, IC se ve en la obligación de precisar que el 7 de octubre, tras la aparición de un caso de Ébola en Madrid y ante la pasividad de la Administración, presentaba denuncia ante la Inspección de Trabajo, ya que hasta esa fecha no se había convocado a los Comités de Seguridad y Salud laboral, órganos competentes en primera instancia para atender a cualquier incidencia en los centro de trabajo, hurtando, además, la información a los legítimos representas de los trabajadores.
Ni la nuestra condición geográfica africana, ni el que los virus no entiendan de fronteras ni cuestiones políticas, ni la deficiente sanidad pública canaria, habían hecho movilizar hasta entonces a la Consejería de Sanidad y al gobierno canario. Es sólo a partir del 7 de octubre, en que Intersindical Canaria formula dicha denuncia, expresa ante los medios de comunicación que Canarias no estaba preparada para enfrentarse a una emergencia por Ébola y reclama la aparición pública de la doña Brígida Mendoza, cuando el “teléfono rojo” de la Consejería comienza a funcionar, y nos remitimos a los siguientes hechos secuenciales:
El día 11, precipitadamente, y después de ser requerida pos sus asesores para ello, la Consejera de Sanidad, improvisa una aparición pública en los medios de comunicación y convoca para dos días después, (lunes 13 de octubre) al Consejo de Dirección del Servicio Canario de Salud, constituye y convoca a la vez el Comité Ejecutivo de Canarias para preparar la respuesta frente al virus Ébola. Además, ese mismo día convoca también al Consejo Canario de la Salud, donde no fue invitada a participar nuestra organización a pesar de ser la más representativa en el sector sanitario. A partir de esta fecha, no antes y gradualmente, comienzan a potenciarse de forma acelerada, descoordinado y a espaldas de la representación sindical, las medidas adoptadas por las distintas gerencias.
No sería hasta el día 14, cuando se convoca al Comité de Seguridad y salud de la Isla de Tenerife, estando pendiente aún de convocar en el resto de islas. A posteriori, se convoca la Mesa Sectorial de Sanidad para el día 21 de octubre. Entre tanta incertidumbre, el día 16 de octubre se activa el Protocolo, en el HUNSC, por un supuesto caso en la Isla de Tenerife, que afortunadamente resulta negativo y que de su funcionamiento se desprende una vez más que el personal del SCS, (acostumbrado a la ineptitud de gestión de los responsables del SCS) es capaz de adaptarse a las condiciones más adversas.
La propuesta para que Canarias haga de puente africano para el Ébola
Sin consulta previa, haciendo uso de su trato colonial, y a propuesta de la ONU, el gobierno del Estado Español, decide utilizar a Canarias como punto para el intercambio de Cooperantes y materiales para combatir el problema del Ébola en origen. Todo ello a pesar del déficit de financiación, los recortes, el colapso de las Urgencias, las Listas de Espera etc., males endémicos del SCS.
Desde Intersindical Canaria exigimos que la primera condición para que el Gobierno Canario acepte convertirse en punto estratégico para la lucha contra el virus Ébola en origen, es que el estado Español y/o la ONU asuman la deuda histórica que mantiene desde hace años con la Sanidad Canaria y que asciende a unos 2.000 millones de € para, de esta forma equiparase a la media del estado, revertir los recortes y estar Canarias en condiciones de infraestructuras y de medios materiales y humanos para asumir una hipotética pero probable situación de emergencia.