Javier Caso Iglesias
{mosimage}Ganemos es, como certeramente resalta Inés Sabanés, un proyecto de carácter cualitativo; no un pacto entre familias a la antigua usanza a los que la vieja izquierda estaba acostumbrada y practicaba (tanto en lo interno como en lo externo). Ganemos no es, por tanto, ni un pacto por las sillas ni un Frente de Izquierdas tradicional. Esas formas de hacer política, por arriba y con la ciudadanía de convidada de piedra, no son propias de la nueva cultura transformadora que se abre camino a pasos agigantados, nueva cultura política que reclama un verdadero proceso (real, cierto y sin engaños) de empoderamiento de la ciudadanía. Empoderamiento usando las nuevas tecnologías para decidirlo todo, tanto presencialmente como online.
Como lo indican destacados responsables de esta iniciativa, en Ganemos se trabaja por lo cualitativo, por las propuestas de cooperación en el objetivo de crear mayorías desde abajo, tanto en lo político como en lo electoral, a través de procesos muy participados por la ciudadanía que cuenten con programas elaborados colaborativamente y primarias ciudadanas; evitándose, por tanto, los procesos meramente cuantitativos de suma de siglas y alianzas electorales clásicas de Frentes de Izquierda con pacto por las sillas en despachos entre tres o cuatro formaciones. Nada pues de patrimonialismos excluyentes o personalismos de casta es admitido en Ganemos.
Estamos trabajando, dicen los promotores de Ganemos, para buscar espacios de confluencia con fuerte protagonismo ciudadano que defienda los servicios públicos, la democracia y el derecho a la ciudad. «Que nadie espere un pacto electoral clásico, estamos hablando de otra cosa que trasciende las formaciones políticas», explica el concejal de Izquierda Unida Jorge García Castaño.
Lo que si está claro es que no habrá un pacto electoral clásico ni una alianza de partidos, es el mensaje que se transmite desde Izquierda Unida y desde el núcleo de Podemos. «No hay acuerdo, ni lo va a haber para crear una coalición electoral clásica».
La opinión de Podemos es nítida al respecto. «No vamos a apostar por una coalición de partidos, ni vamos a apostar porque en un despacho nos repartamos los concejales y los diputados entre tres o cuatro formaciones». Lo que está muy claro en la formación de Pablo Iglesias es que no habrá pactos por las sillas. «No nos vamos a sentar con IU para repartirnos quién va de número dos o número cuatro, el poder debe tenerlo la gente», dice otro importante miembro de Podemos.
Por ello IU va con cautela. «Ganemos es un espacio que no es de nadie ni contra nadie, no se trata de una coalición de izquierdas sino un movimiento con fuerte protagonismo ciudadano en defensa de los derechos y la democracia», dice Jorge G. Castaño, edil de IU en Madrid y que también colabora en Ganemos.
En la formación ecologista Equo, mientras tanto, se valora muy positivamente estar en Ganemos: «En Ganemos se dan las condiciones que nosotros hemos venido reivindicando en este proceso: primarias abiertas y programas participativos, abiertos y compartidos para toda la ciudadanía. Nosotros aspiramos a que Ganemos sea un espacio transformador no sólo electoralmente sino también capaz de movilizar a la ciudadanía», precisa su coportavoz Inés Sabanés, ex de IU, que considera que «cuanta más diversidad, mejor», por eso «Podemos es muy importante».
«El objetivo es crear mayorías por abajo», sostiene Sabanés, la cual insiste en que se entienda que «Ganemos no es un frente de izquierdas», «La idea de Ganemos, o lo que yo entiendo y por lo que participo, no tiene como finalidad la constitución de un frente planteado en términos cuantitativos. Se trata de un proyecto de transformación y de cambio que tiene expresión política en la cooperación y en la suma de propuestas de organizaciones, colectivos, partidos y personas. Creo que esto es diferente a un frente».