Preguntarán en el pleno por las medidas que se piensan tomar para que el coste de estas obras repercuta en las empresas adjudicatarias
{mosimage}SB-Noticias.- El concejal de Sí se puede en La Laguna, Juan Miguel Mena, considera que los 140.000 euros invertidos en la rehabilitación del firme de la avenida Trinidad serán la primera parte de una “gran factura para los presupuestos públicos, ante el nefasto mantenimiento del conjunto de obras realizadas para el tranvía”.
En Sí se puede explican que preguntarán en el próximo pleno municipal por las medidas que se piensan tomar para que el coste de los deterioros que ya aparecen en otros lugares de gran tránsito, vinculadas a los adoquines del tranvía, como la avenida de Los Menceyes, Gracia, Guajara, calle Radio Aficionados o la zona del Hospital Universitario, no tengan que ser asumidas por las arcas públicas y sean reclamadas a las empresas a las que se les adjudicó esta obra.
El edil cree que el Cabildo y el Ayuntamiento deben reclamar a las empresas que realizaron estas obras el coste de la actual reforma, ya que es evidente que las mismas no fueron correctas y no tuvieron en cuenta el volumen de tráfico y las condiciones climáticas, al igual que pasa con los más de 600.000 euros previstos para la reciente repavimentación del Intercambiador lagunero, aprobada por el Consejo de Administración de Metropolitano de Tenerife (MTSA) en marzo pasado.
Indican que la Ley de la Ordenación de la Edificación (LOE) establece que todos los agentes que participan en la edificación, incluidos los promotores, son responsables por los daños ocasionados, por un plazo que depende de la entidad de los defectos, 10 años para defectos estructurales y 3 años para defectos de habitabilidad.
Mena lamenta la escasa previsión de los responsables de las obras de urbanización vinculadas con el tranvía, que en apenas ocho años se han demostrado que no estaban pensadas para la zona. “Ahora tendremos que retirar los adoquines por su alto coste de mantenimiento y además un mobiliario urbano de alto coste, colocado en 2006 y que se encuentra en unas condiciones lamentables”, afirma.
El edil ecosocialista recuerda que las obras de la línea 1 del tranvía renovaron la imagen de este espacio en el 2006 y que en 2010 también se ejecutó otra importante obra en la zona entre la Trinidad y la TF5, donde se gastaron más de 591.000 euros. En Sí se puede recuerdan que también, a raíz de una denuncia pública realizada por su formación, se sustituyeron a finales de 2012 parte de las papeleras de esta vía pública, que durante años no tuvieron ningún mantenimiento, a pesar de que el pliego de condiciones de Urbaser recoge la obligación de realizar tareas periódicas de limpieza y mantenimiento.
El edil pide al delegado de Urbanismo que mida con el mismo rasero la importancia de conservar los inmuebles públicos y los privados
Pedro Fernández Arcila, concejal de Sí se puede en el Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife, se preguntó hoy si el delegado de Urbanismo, José Ángel Martín, está igual de indignado consigo mismo que con algunos propietarios de viviendas antiguas que no las conservan. Esta pregunta es consecuencia de una afirmación de Martín, que dijo la semana pasada sentirse “indignado” con aquellas personas con recursos que no conservan, como es su deber, el patrimonio privado.
El portavoz ecosocialista le recordó al responsable de Urbanismo que el Ayuntamiento es propietario de un importante catálogo de inmuebles antiguos, muchos de los cuales se encuentran en estado de abandono o incluso de ruina, por lo que le pidió que ponga freno a la campaña mediática que ha desarrollado durante este verano “para hacer como que está poniendo orden entre los ciudadanos en el asunto del patrimonio” y se ponga de inmediato a arreglar los problemas que tiene en esta materia el propio Consistorio.
“Tal vez el caso paradigmático sea la Casa Mascareño, una obra arquitectónica del siglo XX de un valor incalculable, que languidece a la espera de que el Ayuntamiento la restaure, pero la lista es larga y no es de recibo que la Corporación les exija a los ciudadanos –sean ricos o pobres– acometer obras de conservación cuando el propio Consistorio no lo hace; su obligación es medir con el mismo rasero”, afirmó Arcila.
Conjuntos históricos
El concejal de Sí se puede pidió a Martín que dé una respuesta clara a la ciudadanía sobre cuál es el procedimiento que se piensa seguir para la rehabilitación de los inmuebles municipales, sobre todo aquellos de los tres conjuntos históricos de la ciudad –El Toscal, Los Hoteles y el Antiguo Santa Cruz–, que se degradan paulatinamente sin que desde las arcas municipales salga ni un euro para evitarlo.
Por otra parte, y en relación con los inmuebles de titularidad privada, Arcila reiteró hoy que no es suficiente con ponerse en contacto con los propietarios, como dice Martín que se está haciendo, sino que es necesario que desde el Consistorio se establezca un plan específico que contemple un censo de inmuebles, una estrategia y un programa de ayudas y de financiación para particulares, como los que ya ha propuesto Sí se puede para propietarios de la zona de El Toscal y de otras partes del municipio.
El pleno municipal tacorontero debatirá esta tarde una moción presentada por Ángel Méndez Guanche y Carmen del Cristo García Estévez, concejales de Sí se puede, en la que reclaman medidas de mejora para el barrio de Tagoro.
La formación ecosocialista ha celebrado varias asambleas abiertas de barrio con los vecinos y vecinas del lugar, donde se han detectado una serie de importantes problemas y carencias sociales que denotan el estado de abandono en que se encuentra la zona, siendo de vital importancia buscar soluciones a la actual situación mediante esta iniciativa en el pleno municipal.
Entre los problemas detectados se ha constatado la existencia de imbornales sellados que provocan escorrentías e inundaciones; solares convertidos en vertederos, aceras en mal estado, calles sin asfaltar y zonas comunes inaccesibles, parque infantil con columpios rotos, sin el adecuado mantenimiento y extrema suciedad generalizada poniendo en peligro la salubridad del lugar.
Indican que existe una cancha polideportiva de propiedad municipal que no cuenta con las mínimas instalaciones, tales como aseos y vestuarios con agua corriente. Ni siquiera en el tiempo estival se dota a los vecinos de actividades propias de esta época y ha tenido que ser la propia gente del lugar la que organice de manera autónoma actividades lúdicas para el tiempo de verano. “De hecho, han sido los propios vecinos los que han improvisado un gimnasio”, explican desde la organización de izquierdas.
Por otra parte Sí se puede también ha constatado la demanda de un mejor transporte público en la zona, ya que el barrio no cuenta con un adecuado servicio, lo cual dificulta el acceso a los servicios y derechos básicos de sanidad y educación a los residentes de allí y a otras actividades de no menor importancia como es la del ocio. A las deficiencias de transporte público, “hay que añadir el elevado coste del precio de la guagua, que en las circunstancias actuales de crisis generalizada no se corresponde con el poder adquisitivo de la mayoría de los residentes, acuciados por una elevada tasa de paro juvenil y de personas paradas de larga duración”.
Ángel Méndez Guanche y Carmen del Cristo García aseguran que con esta moción pretenden dar respuesta política a una ciudadanía que “constata que las llamadas políticas municipales no llegan a barrios como el de Tagoro, y en consecuencia, proponen que el Ayuntamiento organice los servicios municipales esenciales, tales como los servicios sociales, y otros, para que el personal municipal se desplacen al barrio al menos un día a la semana, informando a los vecinos de los asuntos correspondientes a cada servicio y allí mismo se recoja la documentación pertinente”.
Esperan lograr un acuerdo unánime para promover cuantas actuaciones sean necesarias para, a la mayor brevedad posible, dar una solución integral a los problemas del barrio de Tagoro.