Comité de Estibadores / Comité de Empresa de J.T.I. / Comité de Empresa del Grupo RAHN / Comité de Empresa de TITSA
{mosimage}El desmantelamiento de cualquier refinería de petróleo llevaría inevitablemente aparejados perjuicios económicos y laborales para el país que sufriera sus consecuencias. En nuestro caso concreto, dada la gravísima crisis por la que atravesamos, el posible desmantelamiento de la refinería de Sta.Cruz supondría un drama laboral y económico con inmensos efectos negativos sobre el conjunto de la sociedad.
Sin embargo, para nosotros, el desmantelamiento de la Refinería de S/C supondría un grave atentado contra la actividad industrial de la CC.AA de Canarias, cuyo desarrollo económico tiene que restar dependencias respecto del sector turístico, resultando al mismo tiempo necesario el mantenimiento y desarrollo del sector industrial, así como el crecimiento y potenciación de la agricultura.
La pregunta a hacerse no es: ¿Qué hay que hacer para colaborar al desmantelamiento de la refinería?, sino ..¿Qué hay que hacer para mantenerla? Mantenerla, puesto que es estratégicamente imprescindible para la actividad económica de la Comunidad Autónoma y para el empleo, pero mantenerla al mismo tiempo que se disminuyen o eliminan sus índices de participación en la polución atmosférica.
¿Cómo se hace? Si los dueños de la refinería intentaran desmantelarla sería para así obtener 650.000m2 urbanizables. Pero …y si esos terrenos no se pudieran urbanizar… ¿intentarían aún así desmantelarla? Sean cuales fueren las contestaciones a estas preguntas, y aún en contra de la voluntad de sus dueños, la refinería puede y debe ser mantenida. Pero además, el Ayuntamiento de Sta.Cruz tiene que dejar claro que un posible desmantelamiento no llevaría aparejado el uso de los terrenos vacantes para venderlos; que en estos terrenos no concedería permisos para la edificación.
Los trabajadores de la Refinería conocen los efectos que un posible cierre tendría para ellos, sus familias, y para el conjunto de la ciudadanía. Pero también saben que en la Comunidad Autónoma, la refinería es, económicamente, el factor estratégico fundamental y que, por tanto, su continuidad resulta obligada.
Por eso la lucha por el mantenimiento de los puestos de trabajo, es también una lucha por el interés de la ciudadanía en su conjunto. Lo que está en juego no son sólo situaciones sectoriales, son igualmente situaciones colectivas.