{mosimage}Agencias.- Un joven negro fue asesinado a tiros por los oficiales del Departamento de Policía Metropolitana de San Luis el mediodía del martes, a menos de siete kilómetros del lugar donde tenían lugar las protestas en la ciudad de Ferguson. El hombre blandía un cuchillo, según informaron unos testigos citados por el portal ksdk.com.
Cuando la Policía llegó el sospechoso se acercó a los agentes, luego sacó un cuchillo y amenazó con él a los policías. Los agentes, que aún se encontraban en el vehículo de la patrulla, y los testigos dicen que el sospechoso gritó: "Dispárame ahora, mátame ahora". Los policías ordenaron al hombre que bajara el cuchillo, pero, según Dotson, el joven no respondió a las órdenes verbales.
Uno de los agentes salió del coche patrulla. Luego el sospechoso mostró su cuchillo, momento en el cual los agentes desenfundaron sus armas. El sospechoso se dirigió hacia el oficial que todavía estaba dentro del coche y, cuando se encontraba a tres metros del vehículo, ambos oficiales le abatieron a disparos.
Según Dotson, la Policía está comprobando si el incidente fue captado por alguna cámara de vigilancia. Dotson sostiene que los testigos afirman que vieron y oyeron cómo los oficiales daban órdenes al sospechoso de bajar el cuchillo.
El arma fue recuperada en la escena de los hechos. Cuando se le preguntó a Dotson si cree que el tiroteo fue justificado, respondió que sus oficiales "tienen el derecho de ir a casa por la noche" y que cada policía tiene derecho a defenderse a sí mismo y a la comunidad.
El sospechoso no identificado fue declarado muerto en la escena. Una hora después de los acontecimientos, una multitud se había congregado en la zona protestando contra las acciones de la Policía en el contexto del asesinato reciente de otro joven afroamericano, Mike Brown.
El Pentágono aseguró este martes que la policía estadounidense está autorizada para utilizar armas militares desde 1991. En respuesta a las criticas que ha recibido la policía estadounidense por el excesivo uso de la fuerza en Ferguson Missuri (oeste), el Pentágono aseguró este martes que ha sido de gran utilidad el equipamiento militar entregado a los efectivos policiales en ese país.
De acuerdo con el portavoz del Departamento de Defensa estadounidense, John Kirby, los equipos militares asignados a las agencias policiales de la nación son de gran utilidad para resguardar la integridad física de las personas.
“Esto no es un programa que está fuera de control”, aseguró el funcionario a propósito de los disturbios que acechan a la población de Ferguson Missuri desde hace más de 10 días.
La muerte de Michael Brown de 18 años, un joven afroamericano abrió paso a una serie de protestas contra el Gobierno de Obama quien según los manifestantes no ha promovido un debate sobre el racismo en la nación.
Sin embargo, Kirby dijo que el presidente Barack Obama no ha conversado sobre ese tema ni ha exigido una revisión del programa de entrega de armas militares a los funcionarios.
“El Pentágono entrega diversas armas y vehículos a las agencias policiales a escala nacional porque así fue aprobado por el Congreso desde 1991”, dijo.
Recientemente, Obama lamentó que hechos similares sigan cobrando vidas de inocentes en su país e hizo un llamado a la población a promover la paz y la tolerancia en vez de cultivar el odio y la violencia.
Respecto a la situación actual en Ferguson, el Ministerio ruso de Asuntos Exteriores subrayó que las autoridades de EE.UU. "no se privan de emplear mano dura" con los que se quejan de la desigualdad racial en la sociedad estadounidense.
"Parece que las autoridades de EE.UU. tendrían que ocuparse de los problemas internos de grandes dimensiones que tienen y adoptar medidas eficaces para hacerles frente. Esta es una forma más constructiva y acorde a la realidad del siglo XXI que la política heredera del pasado de intervención en los asuntos de otros países y de cambio de regímenes indeseables bajo el falso pretexto de defender la democracia y los derechos humanos", reza un comunicado en la página web del Ministerio de Relaciones Exteriores.
Dolgov destacó que los disturbios de Ferguson y la reacción de las autoridades de EE.UU. a la situación "una vez más confirma la presencia de profundos problemas sistémicos con los derechos humanos y las normas democráticas en la sociedad estadounidense".
"Exigiendo que otros países garanticen la libertad de expresión y no repriman las protestas antigubernamentales, el Gobierno de EE.UU. no se priva de emplear mano dura en casa con quienes muestran activamente su indignación por las persistentes desigualdades, la discriminación y la existencia de ciudadanos de 'segunda clase'", afirmó Dolgov.
El diplomático ruso también señaló que los activistas estadounidenses en defensa de los derechos humanos están haciendo sonar la alarma sobre la creciente práctica del "uso policial injustificada e impune de armas de un arsenal militar contra la población civil" en EE.UU. "Además, las víctimas de abusos policiales son en su mayoría afroamericanos, hispanos y asiáticos", denunció el representante de la Cancillería.