EL BAR DE PEPE
Joaquín Hernández
{mosimage}Dicen que los modales, la educación, la forma que demostramos nuestras fobias o filias forman parte de la cultura de los pueblos. De manera que hay refranes como aquel que dice “en la mesa y en el juego se notan los caballeros” definen muy bien que el saber comer con “tenedor y cuchara, sin hablar con la comida en la boca y con comedimiento” y “el que sabe perder en el juego” es todo un caballero.
Ustedes dirán ¿a qué viene éste hombre con ese rollo de refranes? El caso, si se ponen en situación, es el siguiente: La Unión Deportiva Las Palmas S.A.D. juega el partido de vuelta del play off de los ascensos de la 2ª división de fútbol española a la 1ª división. En el partido de ida con el Cordoba Club de Fútbol el resultado ha sido 0-0, por lo tanto un empate a 0 en la ida jugando en casa beneficia al conjunto local al haber quedado en mejor lugar en la tabla clasificatoria de la liga.
El partido es intenso, el estadio insular a reventar, más de 30 mil personas y la gente hasta en el mástil de las banderas animando a su equipo, la U.D. Las Palmas S.A.D. De repente una jugada y GOLLLLLLLLLLLLLLLL un maravilloso GOLLLLL del equipo local. A falta de 10 minutos para terminar el partido le da la victoria y es equipo de la 1ª División de la mejor liga de fútbol del mundo mundial, la española, la gente loca de alegría!!
Se acabaron los problemas, ¡¡viva el furbor!! Gritando “Paulino, Paulino es cojonudo, como Paulino no hay ninguno!!, en clara alusión al presi del Gobierno de Canarias, máximo hacedor de la fiesta furbolera, se abalanza hacia el campo y a un minuto y medio antes de terminar el encuentro empiezan a celebrar el ascenso de tal manera que el árbitro se ve obligado a suspender el encuentro por varios minutos, para que la plebe canariona se vuelva a situar fuera del terreno deportivo y así poder reanudar el encuentro. La enfebrecida afición a la que, por la forma de actuar, se le había quitado todos sus males, es decir; el paro obrero no era de un 34,7%, la sanidad no estaba a punto de ser privatizada y volver al tercermundismo la educación, las pensiones en Canarias, al igual que los salarios, los más bajos de Europa, y la indigencia rondando el 60% había desaparecido, todo era igual. La borrachera de alegría era tal que los seguidores de la U.D. Las Palmas S.A.D. se mostraban delante de la portería haciendo gestos ante las cámaras de la tv enseñando sus traseros y con el corte de mangas mandando a tomar por saco a todo Córdoba y los cordobeses.
La actuación del árbitro, con el reglamento en la mano, fue suspender el partido por 10 minutos para poner orden en la cancha del estadio gran canario con el aporte de jugadores del equipo local que, con más o menos riesgo de llevarse una patada de sus propios, lograron despejar el césped y reanudar el partido. Los dos equipos salieron nuevamente al campo, los jugadores del equipo isleño contentos y felices ya que en menos de minuto y medio verían su sueño cumplido, los otros del equipo contrario con la idea fija de meter el balón en la portería del equipo local, y….. tatachinnnnnn tatachonnnnnn, un centro del equipo visitante, o sea del Córdoba, al área que defiende la U.D. Las Palmas, el balón rebota y de un remate flojo da en la mano del guardameta y se produce el milagro y GOLLLLLLLLLLLLLLLLLLLLLLLL GOLLLLLLLL DEL CORDOBA. El empate favorece al equipo visitante por lo que el Córdoba Club de Futbol después de 42 años vuelve a ser equipo de la 1ª división del fútbol español.
La reflexión es la siguiente: ¿Qué pasaría si esta serie de energúmenos desquiciados pusieran el mismo ardor y animo en defender sus derechos fundamentales y el futuro de sus hijos como lo hacen defendiendo los colores del famoso pio, pio? No me alegro de la derrota de la U.D. Las Palmas, quien me conoce sabe bien que quiero lo mejor para mis siete islas, pero en esta ocasión la lección que sirva para algo más que para quejarnos, solo resta felicitar a los cordobeses por su ascenso, ¡¡se lo merecen!! Y la próxima convocatoria de manifestación esos miles de cretinos que pongan la misma intensidad de ánimo en protestar y defender lo que nos está robando. Moraleja: “no vendas la piel del oso antes de cazarlo” .