laopinion.es/19 de marzo de 2009.-Noé Ramón, Santa Cruz de Tenerife. La resolución adoptada por la Gerencia de Urbanismo sobre Las Huertas implica que de los 120.000 metros cuadrados adquiridos por Mapfre a Inversiones Las Teresitas (ILT) en el año 2006 por 120 millones de euros, casi la mitad se revertirán de nuevo a los dueños originales: los vecinos de este entorno. La concejal de Urbanismo, Luz Reverón, dará hoy cuenta en el pleno del contenido de este informe, que devuelve 17 de las 31 parcelas en litigio a sus primeros propietarios.
El portavoz de los vecinos, Guillermo Acuña, señala que a partir de ahora se sienten legitimados para pedir la anulación del plan parcial de Las Teresitas y además, exigir que su futuro contenido se negocie con ellos. Aunque la satisfacción es la tónica dominante entre los vecinos de Las Huertas después de años de lucha para que se reconozcan sus derechos, lo cierto es que no se esconde cierta decepción por el hecho de que 11 parcelas han quedado fuera de este reconocimiento.
Al sospechar que se han producido algunos errores por parte de Urbanismo, los vecinos han pedido que no se cierre hoy el expediente administrativo, ya que se han descartado parcelas sobre las que el Tribunal Supremo (TS) ya había emitido sentencias obligando a su reversión sobre los propietarios originales. La portavoz de la Plataforma en defensa de Las Teresitas, Lola Schneider, cree que "por fin se está haciendo justicia y espero que se siga en esta misma línea". La vecina de Las Huertas Jacinta Baute señalaba ayer que "ahora me siento más tranquila después de años de tantas luchas y de no saber qué iba a ocurrir con nuestras propiedades".
Inversiones Las Teresitas. Por su parte, ILT considera que la expropiación no pudo quedar sin efecto, al no haberse producido la ocupación material de las parcelas. Se sostiene que la inscripción registral del proyecto implica la extinción del derecho de reversión. Asimismo, la empresa de Ignacio González y Antonio Plasencia cree que hubo "una falta de diligencia del Ayuntamiento en la supervisión y aprobación de la reparcelación; por eso, ante el funcionamiento anormal de los servicios públicos, creen que es el Ayuntamiento el que debe indemnizar a los afectados y proteger a la empresa Mapfre, como tercero de buena fe.
La empresa Desarrollos Urbanos CIC SA (Desurcic), propiedad de Mapfre, mantiene que la renuncia de la Junta a expropiar estos terrenos sólo podía haber sido aprobada por el gobernador civil según la legislación de los años 70, por lo que el acuerdo adoptado por el Ayuntamiento, es "nulo de pleno derecho".
Indican los abogados de esta empresa que legalmente es imposible desistir de una expropiación y que en cualquier caso, el derecho de los reclamantes es tan sólo económico, "por cuanto todo el proceso urbanístico se halla culminado". La empresa de Mapfre considera que los vecinos "han demostrado gran pasividad porque no han formulado reclamaciones hasta ahora, dejando caducar todo el proceso incoado". Esta empresa sostiene que deben tomarse las medidas adecuadas para que el Registro de la Propiedad adopte las medidas necesarias para "mantener la seguridad del tráfico jurídico".
Esta empresa sigue manteniendo ante la Gerencia de #Urbanismo que son los auténticos propietarios de los terrenos y por ello solicitan la cancelación registral de las fincas que figuran inscritas a nombre de los reclamantes en el Registro de la Propiedad "y que se adopten las medidas cautelares con la finalidad de otorgar y garantizar la protección jurídica a estos adquirientes de buena fe". O sea, ellos mismos. Y es que una de las principales incógnitas es qué ocurrirá ahora que gran parte de la compraventa de los terrenos se ha visto desmantelada.
La Policía desaloja la mayor parte de las casetas situadas en Las Teresitas
Agentes de la Policía Nacional, así como personal de la Dirección General de Costas, procedieron el pasado miércoles a desalojar varias de las casetas que aún se mantenían en pie al inicio de la playa de Las Teresitas.
Por ello, en estos momentos tan sólo quedan tres de estas infraviviendas en el lugar, a la espera de que finalmente el juez emita un auto permitiendo el desalojo. Costas está actuando en este entorno después de que hace algunas semanas se aprobara de forma definitiva el nuevo deslinde de Las Teresitas que sitúa a estas casetas en pleno dominio público. Uno de los ocupantes de las casetas, Juan Francisco Padrón, indicaba que en cualquier momento espera ser desalojado.
Su caso es especialmente grave, ya que no tiene ninguna casa a donde ir. Señala que el miércoles por la mañana se personaron en este lugar alrededor de veinte policías y personal de la Dirección General de Costas. Asegura que vive en una gran "incertidumbre", puesto que no sabe a dónde podrá ir a vivir una vez que sea desalojado de esta infravivienda que se ha convertido en su única casa. En el día de ayer, personal de una empresa especializada en la retirada de uralita, un material de la construcción que es considerado muy contaminante, estaban llevando a cabo la demolición de estas casetas y restaurando el lugar a su estado primitivo.
Padrón manifiesta no comprender cómo se permite que el mamotreto siga aún en pie, mientras que "se está actuando sin compasión contra los pobres". En este lugar se situaban hace pocos meses una veintena de casetas que eran utilizadas por los pescadores para depositar sus pertrechos. Sin embargo, algunas se habían convertido también residencia de vecinos.