La Gaceta de Canarias / 18 de junio de 2008.- D.C. Santa Cruz de Tenerife. Las palas no pueden con los vecinos del valle de Las Huertas. Los operarios de la empresa Dragados lo han intentado de todas las maneras pero, cada día más, la continuación de las obras parece una misión imposible.
Los propietarios de las parcelas de la discordia, esas que aseguran que son suyas pero que la Junta de Compensación les expropió sin darles un céntimo para después venderlas a Mapfre, tienen claro que la maquinaria pesada no va a entrar en sus fincas. Para ello son capaces de todo.
Como ejemplo, las cerca de cien personas que se congregaron ayer en el valle para frenar las palas. Alguien dio la voz de alarma y los vecinos estaban preparados. Desde las siete de la mañana hacían guardia en el puesto que tienen habilitado para tal fin. Poco después, la maquinaria de Dragados (empresa contratada por Mapfre para ejecutar las obras) se acercaba a las fincas de la discordia.Hoy sí, pensarían los operarios. Hoy tampoco, clamaba la masa de gente disconforme con que se invada su propiedad.
Pero la estampa final tuvo unos invitados a los que nadie esperaba. Miembros de la Policía Nacional se personaron en el lugar (lo que extrañó a los afectados porque ellos no los convocaron) y pidieron documentación a varios de los vecinos.
La situación, de hecho, ha llegado a un punto que obliga a los afectados a cuestionarse por qué el Ayuntamiento no paraliza las obras. Más aún, al considerar un dato fundamental la imputación, por parte del Tribunal Superior de Justicia de Canarias, de los directivos de la Junta de Compensación por apropiación indebida, un
hecho claramente relacionado con la expropiación ilegal que realizó la Junta en Las Huertas. Gritos de protesta en San Andrés sin respuesta de apoyo por parte la Gerencia de Urbanismo. La concejala del Área, Luz Reverón, repitió ayer el discurso mantenido en los últimos meses: “Las obras no se pararán si no hay un informe jurídico de los técnicos municipales que avale esa decisión”.
El concejal de Ciudadanos Ángel Guimerá aseguró que el Consistorio “tiene suficientes argumentos para suspender las obras”, a lo que añadió que “existe un Decreto que sustentaría esa decisión”.Algo que negó Reverón, “porque dicho documento es posterior al inicio de los trabajos”.
Batallas jurídicas que tienen un terreno de disputa donde no luchan abogados, sino los vecinos de Las Huertas.